CRÍMENES DE HOLLYWOOD: SHARON TATE
“¿Qué clase de mundo es éste que puede mandar máquinas a Marte y no hace nada para detener el asesinato de un ser humano?”
José Saramago
Joven, hermosa, embarazada, feliz. Sharon Tate lo
tenía todo. Pero la locura y la maldad acabaron con su vida en lo que muchos
sociólogos consideran como un momento clave en la década de los ’60. Joan
Didion escribió: "Mucha gente que conozco de Los Angeles
cree que los ‘60 acabaron de forma repentina el 9 de agosto de 1969, en el
mismo momento en que la noticia de los asesinatos de Cielo Drive viajaron como
maleza incendiada por la población, siendo hasta cierto punto verdad. Ese día
comenzó la tensión. Comenzó la paranoia".
Bienvenidos,
amables lectores, a otra entrega de “Crímenes de Hollywood”.
SHARON TATE: UN POCO DE HISTORIA
Sharon Tate nació en Dallas, Texas, el 24 de enero de 1943. Fue la primera de las tres hijas de Paul James Tate, un coronel del Ejército de los Estados Unidos, y su esposa Doris Gwendolyn.
Al alcanzar la adolescencia, Sharon participó en
varios concursos de belleza e inició su carrera en el cine en 1964, con un pequeño papel en la película "The Americanization of Emily" (Arthur Hiller). En 1965 tuvo otro pequeño papel en "The Sandpiper" (Vincente Minnelli). Su primer papel de importancia llegó en 1966 con la película "Eye of the Devil (J. Lee Thompson), coprotagonizada por David Niven, Deborah Kerr, Donald Pleasence y David Hemmings. Tate interpretó a Odile, una bruja que ejerce un misterioso poder sobre un terrateniente, interpretado por Niven, y su esposa, interpretada por Kerr. Sharon viajó a Londres junto a su pareja de entonces, Jay Sebring, con motivo del rodaje, y después de terminar la filmación, permaneció en la ciudad, mientras que su novio volvió a E.E. U.U. En la capital británica, la actriz se sumergió en el mundo de la moda y las discotecas, y conoció a Roman Polanski, que estaba proyectando "The Fearless Vampire Killers" ("La danza de los vampiros"). Sharon terminó enamorándose de Polanski y formando parte del elenco de la película, después de terminar el rodaje, se mudó al apartamento de Roman. Jay Sebring, al conocer la noticia, viajó a Londres e insistió en encontrarse con Polanski. Aunque más tarde sus amigos dijeron que estaba devastado, se hizo amigo de su rival y se convirtió en el confidente de Sharon. Polanski comentó más adelante que Sebring era una persona solitaria y retraída, que los veía a Tate y a él como su familia.
EL ASESINATO DE SHARON TATE
El 8 de agosto de 1969, Sharon Tate estaba a dos semanas de dar
a luz. Ese día tuvo a dos invitadas en su casa para almorzar, las actrices Joanna Pettet y Barbara Lewis. Por la tarde, Roman Polanski, con quien se había casado en 1968, la llamó por teléfono desde Londres. Su hermana pequeña, Debra, también la
llamó para preguntar si se podía quedar, junto a su hermana Patti, a pasar la
noche en su casa, pero Sharon le dijo que no. Esa noche fue a cenar a su
restaurante favorito, "El Coyote", junto a Jay Sebring, Voytek Frykowski y
Abigail Folger, y regresó a su casa, acompañada por sus amigos, alrededor de las 22:30.
Esa misma noche, todos fueron brutalmente asesinados. Los cuerpos de Tate y sus acompañantes aparecieron desgarrados y el piso de la mansión salpicado de sangre y vísceras. Winifred Chapman, la encargada de la limpieza, los encontró y dio parte a la policía.
La policía llegó a la escena del crimen y halló, en primer lugar, el cuerpo sin vida de un joven, identificado posteriormente como Steven Parent, muerto a tiros en su coche, ubicado en la entrada de la casa. En el living de la mansión encontró los cuerpos de Tate y Sebring, con una cuerda larga atada a sus cuellos para conectarlos entre sí. En el jardín de la entrada, los cadáveres de Frykowski y Folger. Todas las víctimas, a excepción de Parent, habían recibido numerosas puñaladas. En el informe forense se constata que Tate "recibió dieciséis puñaladas, de las cuales cinco hubiesen sido mortales por sí solas".
La policía se llevó al único superviviente, el conserje William Garretson, para interrogarlo. Garretson vivía en la casa de invitados, que se encontraba cerca de la casa principal, aunque no directamente visible. Como primer sospechoso, procedieron a interrogarlo y a hacerle una prueba de polígrafo. Declaró que Parent lo visitó a las 23:30 y que se marchó a los pocos minutos, y aseguró no tener nada que ver con los asesinatos, tras lo cual fue liberado.
Roman Polanski fue informado de lo ocurrido y regresó de inmediato a Los Angeles donde los policías, incapaces de encontrar motivos para los asesinatos, comenzaron a inquirir sobre Tate y sus amistades. El miércoles 13 de agosto, Sharon fue enterrada en el "Holy Cross Cemetery", en Culver City, California, con su hijo, Paul Richard Polanski en brazos. El funeral de Sebring también se celebró ese mismo día, por lo que las ceremonias se programaron con varias horas de diferencia, para permitir que los amigos en común pudiesen asistir a ambas.
La revista "Life" dedicó un extenso artículo a los asesinatos, con fotografías de la escena de los crímenes. Entrevistaron a Polanski, quien incluso permitió que se le fotografiase en el salón de estar donde murieron Tate y Sebring, con la sangre seca de Sharon claramente visible en el suelo. Polanski respondió a las críticas alegando que lo había hecho porque quería saber quiénes eran los responsables de la muerte de su esposa, por lo que buscaba impresionar a los lectores de la revista con la esperanza de que alguien pudiese ayudar en la investigación.
Algunos periódicos comenzaron a especular sobre los motivos de los asesinatos e insinuaron que ciertas fotografías de Sharon habían sido tomadas durante un ritual satánico, aunque después se comprobó que correspondían a la producción de la película de J. Lee Thompson, "Eye of the Devil". Las amistades de Tate salieron en varias ocasiones a criticar el trato de los medios. Mia Farrow dijo que era "un ser humano dulce y puro como ninguno", mientras que Patty Duke la recordó como "una criatura dulce, dulce. Yo estaba loca con ella, y no conozco a nadie que no lo estuviese". Polanski llegó a reprender a los periodistas en una rueda de prensa, diciéndoles que todos habían escrito sobre la belleza de Sharon pero ninguno había reparado en su bondad.
Roman Polanski llegó a admitir después, que en los meses siguientes a los asesinatos, sospechó de varios amigos y colegas, y que su paranoia solo se apaciguó con el arresto de los verdaderos culpables. Los periódicos afirmaron que muchas estrellas de Hollywood estaban yéndose de la ciudad, mientras que otros estaban instalando sistemas de seguridad en sus casas. El escritor Dominick Dunne recordó esta tensión: "La oleada de pánico que atravesó la ciudad era superior a nada de lo que había visto antes. La gente estaba convencida de que la comunidad de ricos y famosos estaba en peligro. A los niños se les sacó de la ciudad. Se alquiló seguridad. Steve McQueen se llevó un arma cuando acudió al funeral de Jay Sebring".
LA FAMILIA MANSON
En noviembre de 1969, mientras Susan Atkins se encontraba encarcelada por el robo de un coche, alardeó delante de otra presa que era responsable del asesinato de Sharon Tate. Esto la llevó a ser acusada junto a los cómplices que ella misma señaló: Charles Manson, Tex Watson, Patricia Krenwinkel y Linda Kasabian. También reveló que los asesinatos de Leno y Rosemary LaBianca ocurrido en Los Feliz, Los Angeles, la noche después del asesinato de Tate, eran obra de los mismos criminales, incriminando en ellos, además, a Leslie Van Houten.
El 15 de junio de 1970 comenzó el juicio contra Manson, Atkins, Krenwinkel y Van Houten, mientras Watson permaneció en Texas luchando contra la extradición. Los detalles del juicio se divulgaron por todo el mundo. Manson era el líder de un grupo de hippies que se hacía llamar "La Familia" y estaba seguro de que se acercaba una guerra racial de forma inminente. Creía que el "White Album" de The Beatles hablaba de este acontecimiento, al que se refería como "Helter Skelter", en referencia a una de las canciones del disco. Según Manson, los negros se levantarían contra los blancos y los vencerían, pero luego necesitarían a un grupo de iluminados que los gobernaran: ese era el papel reservado para él y su "Familia". Charles Manson pensó que podría acelerar la guerra racial matando salvajemente a gente pudiente en sus casas e intentando hacer recaer las sospechas sobre grupos como los "Black Panthers".
En el juicio se supo que, la noche de los asesinatos, Chales “Tex” Watson, Susan D. Atkins y Patricia Krenwinkle saltaron la alambrada de seguridad y accedieron al jardín de la residencia, a la cual ingresaron luego de la rotura de los cristales de la fachada principal. Linda Kassabian actuó como conductora y campana. Los tres jóvenes, acólitos del psicópata Charles Manson, protagonizaron una cruel matanza. Tate fue asesinada por Susan Atkins, que le asestó 11 puñaladas y la arrastró con una cuerda por la estancia, para luego colgarla de la baranda de una escalera. Ante los ruegos de Sharon por la vida del bebé que llevaba en el vientre, una fría Atkins respondió “No voy a tener clemencia contigo, zorra”.
El 29 de marzo de 1971 se declaró a los acusados culpables y se los condenó a muerte, aunque más tarde sus penas fueron conmutadas a cadena perpetua. A Charles Watson se lo juzgó por separado después de ser extraditado desde Texas y se lo declaró culpable el 21 de octubre de 1971. Al día de hoy, Watson, Krenwinkel y Van Houten continúan encarcelados. Atkins murió en prisión el 24 de septiembre de 2009, y Manson, el 19 de noviembre de 2017.
LA CONFESIÓN DE SUSAN ATKINS
LA CONFESIÓN DE SUSAN ATKINS
Susan Atkins, la asesina material de Sharon Tate, llamada por "La Familia" Sadie Mae Glutz o Sexy Sadie, hizo escalofriantes declaraciones acerca del crimen: "Sharon
estaba solándose de la cuerda con la que la habíamos atado. Yo volteé y vi a
Abigail luchando aún con Katie, quien por fin acuchilló a aquella mujer y ésta
quedó inerme. Yo, entonces, me acerqué a Sharon por atrás y le apliqué una
llave al cuello. Sharon empezó a suplicarme que no la matara, que la dejara
vivir para que pudiera tener a su hijo. Katie me miró y yo le pedí ayuda. Pero
ella salió a buscar a Tex, que estaba en el jardín. Yo seguí aplicando la llave
a Sharon y ella volvió a suplicarme que no la matara, que lo hiciera por el
hijo que estaba por nacer. Entonces
regresó Tex. Sharon me miró fijamente y me dijo una vez más que no le hiciera
daño, que la dejara vivir. Yo tenía que hacer algo antes de que se pusiera
histérica. 'No puedo tener piedad contigo', le dije. Ella me miró extrañamente y
entonces le clavé el cuchillo, primero en el cuello y luego en el pecho. Sharon
cayó al suelo y empezó a sangrar. Me dijo algo pero no le entendí bien. Se
acercó rápidamente Tex y me dijo que la acuchillara en el vientre. Yo le metí
el cuchillo pero no me atreví a empujarlo más adentro. Entonces Tex me lo quitó
y la apuñaló en el estómago tres o cuatro veces. Creo que él fue quien a mató,
pues Sharon ya no dijo nada. Tex
me ordenó entonces: 'Regresa al jardín y escribe algo sobre la puerta'. Se me
ocurrió entonces una idea y me acerqué a Sharon. ¡Uf...!, allí había un ser
viviente moviéndose en el vientre. Pensé abrírselo y sacar al bebé, pues
escuchaba como gorgoteaba la sangre en el interior, pero no pude. Oí un ruido
muy desagradable. Ahora sé que le llaman el cascabeleo de la muerte. Tomé
una toalla y la empapé con sangre del pecho y el vientre de Sharon. Tex me
ordenó: 'Escribe la palabra cerdo'. ¡Y así lo hice! Entonces, todos salimos corriendo.
Tex, Katie y yo.”
LA PREMONICIÓN DE SHARON TATE
La actriz Jean Harlow y su esposo, el productor Paul Bern, vivieron juntos en una mansión ubicada en el 9820 de Easton Drive, en Benedict Canyon, Beverly Hills. El 4 de septiembre de 1932, el mayordomo del matrimonio encontró a Bern muerto en el dormitorio de su esposa con un tiro en la cabeza, empapado en el perfume de su esposa. Se había suicidado, supuestamente porque su impotencia era un insalvable escollo en su relación con la rubia platino.
Todos los propietarios posteriores de la casa reportaron apariciones fantasmales y hechos inexplicables en el lugar. En 1963, la casa fue comprada por Jay Sebring, que no creía en maldiciones y no se dejó amedrentar ni por el fantasma de Paul Bern, ni por un supuesto accidente ocurrido en la piscina de la mansión, donde se ahogaron dos personas.
Durante la época de su relación con Sebring, Sharon Tate pasaba mucho tiempo en la casa de Benedict Canyon. Una noche, según contó la propia actriz, estaba en su habitación mientras Sebring se encontraba de viaje en Nueva York. De pronto vio un pequeño y tenebroso hombre en la habitación, cuya descripción encajaba con la de Paul Bern. Parecía buscar algo y la ignoró por completo. Impactada por la aparición, Sharon corrió hacia el piso de abajo, y vio a otra persona colgando de la baranda de la escalera con la garganta cortada. Conmocionada, Tate entró en la sala de estar para servirse un trago, pero no encontró dónde Sebring guardaba el alcohol. Sintió el inexplicable impulso de presionar una sección de una biblioteca, que se abrió revelando una barra oculta. Sin pensar, arrancó un pedazo de papel tapiz en la base de la barra mientras se servía una copa. Por la mañana, Sharon estaba convencida de que todo había sido una terrible pesadilla, hasta que vio el papel tapiz que había arrancado del bar.
Luego de los asesinatos, quienes conocían esta historia, aseguraron que Sharon no sólo se había topado con Paul Bern en la antigua casa de Jean Harlow, sino que había tenido una premonición de su trágica muerte: la actriz apareció colgada de una soga en el living de la mansión.
EL
BEBÉ DE ROSEMARY
Basada en un libro de Ira Levin, “Rosemary's Baby” se estrenó el 12 de junio de 1968 y fue la primera
película totalmente estadounidense de Roman Polanski, que recrea ciertas ceremonias y ritos
satánicos, filmados con el valioso asesoramiento de Anton La Vey, el excéntrico fundador de la Iglesia de
Satán. La película narra la historia de Guy Woodhouse (John Cassavetes) y su esposa Rosemary (Mia Farrow), una pareja de recién
casados que alquila un departamento en la mítica “Casa Bramford” y
se involucra con una secta demoníaca. Rosemary, sin saberlo, lleva
en sus entrañas al hijo del Demonio.
Luego del asesinato de Sharon Tate y de la detención de la "Familia Manson", surgieron muchas
hipótesis existen acerca del móvil de los asesinatos, entre ellas, la de
los militantes del mundo esotérico que se inclinan por una “venganza
diabólica” auspiciada por altos jefes del satanismo mundial y llevada
a cabo por Manson y sus secuaces. Los
elogios que la crítica prodigó al film contrastaron con la disconforme censura
de los satanistas quienes sintieron que su privacidad había sido invadida y
ventilada, y, aparentemente, no dudaron en practicar sus diabólicas artes de magia negra para
maldecir a todo aquel que hubiera participado en la película. Según
la teoría de los ocultistas, las sectas satánicas más poderosas del mundo se
unieron para vengarse del cineasta, al que enviaron un escueto comunicado: “Pagarás
tu intromisión y tu osadía con sangre”.
Por último, cabe destacar que
algunas escenas de “Rosemary's Baby” fueron filmadas en el edificio Dakota, en
el centro de Nueva York, donde años antes habían vivido un genio del
cine de terror, el actor Boris Karloff y un célebre brujo negro, famoso por sus
ritos desenfrenados, Aleister Crowley (un personaje cuyo rostro
figura en la portada del disco de The Beatles “Sgt.
Pepper's Lonely Hearts Club Band”). Este edifico siempre fue considerado
maldito y por eso fue recomendado a Polanski para lograr un clima satánico en
su rodaje. Frente a esta mítica construcción fue asesinado John Lennon en
1980.
A comienzos de los años '80,
Stephen Kay, quien había trabajado para la acusación en el juicio, se enteró de
que Leslie
Van Houten había conseguido reunir 900
firmas para pedir su puesta en libertad condicional. Contactó a la madre de
Sharon Tate para intentar reunir firmas para que dicha libertad
condicional se le denegase . Estaban seguros de su éxito, por lo que ambos montaron una campaña
publicitaria, consiguiendo reunir más de 350.000 firmas. Van Houten era la
candidata más probable de todos para conseguir la libertad condicional, pero gracias
a los esfuerzos de Kay y Tate, se le denegó. Doris Tate se convirtió en vocal
defensora de los derechos de las víctimas, hablando sobre el asesinato de su
hija y reuniéndose con otras víctimas de crímenes. Asumió un papel de
consejera, usando su notoriedad pública para animar el debate y criticar el
sistema penal.
Doris dedicó mucho del resto de su vida a luchar contra todas las
peticiones de libertad condicional de los asesinos de "La Familia" y trabajó de cerca con otras víctimas de crímenes violentos. Se enfrentó
en varias ocasiones a Charles Watson en audiencias de peticiones de libertad
condicional, diciendo: "Siento que Sharon debe estar representada en esas
audiciones. Si están [los asesinos] suplicando por sus vidas, pues debo estar
allí para representarla". En 1984, replicó a Watson directamente: "¿Qué
misericordia, señor, mostró cuando mi hija suplicaba por su vida? ¿Qué
misericordia mostró con mi hija cuando le dijo, denme dos semanas para tener a
mi bebé y después me pueden matar? ¿Cuándo obtendrá Sharon la libertad
condicional? ¿Saldrán de sus tumbas estas siete víctimas o posiblemente más si
usted consigue la libertad? Usted no es de fiar".
En 1992, el presidente George H. W. Bush comentó
que Doris Tate era uno de sus "mil puntos de luz" (frase utilizada
por el ex presidente muy a menudo para referirse a las cosas que iluminaban su camino) por su trabajo voluntario por los derechos de las víctimas. En esta
época Tate había sido diagnosticada con un tumor cerebral maligno,
por lo que le fallaban la fuerza y la salud; su reunión con Bush significó su
última aparición pública. Ese mismo año, Doris (antes de fallecer el 10 de
julio), legó a su hija pequeña Patti su trabajo. También contribuyó en la
fundación de "Doris Tate Crime Victims Bureau", una organización no gubernamental dedicada
a influenciar la legislación de Estados Unidos y para dar protección a las
víctimas de crímenes violentos.
Patti Tate se enfrentó a David Geffen y
directivos de Geffen
Records en 1993 sobre los planes de incluir en un álbum
de Guns
N' Roses la canción"The Spaghetti Incident?", compuesta por Charles Manson. Comentó a un periodista que la compañía
discográfica estaba "poniendo a Manson en un pedestal para que la gente
joven que no le conozca lo veneren como a un ídolo".
Después de la muerte de Patti por un cáncer de mama el
3 de junio de 2000, su hermana mayor Debra continuó con el trabajo representando
a la familia Tate en las peticiones de libertad condicional. Debra Tate dijo de
los asesinos: "No muestran ningún tipo de responsabilidad personal. No han
hecho expiación a ninguno de los miembros de la famila". También
ha peleado por conseguir que se le concediese a Sharon Tate una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
El coronel Paul Tate prefirió no hacer comentarios públicos; sin
embargo, estuvo presente en el juicio de los asesinatos y en los años siguientes, junto a su esposa, en las peticiones de libertad condicional, además
de escribir cartas a las autoridades oponiéndose rotundamente a la idea de
conceder libertad condicional a ninguno de los asesinos. Murió el 18 de mayo de
2005.
Greg King, el biógrafo de Sharon Tate, escribió en "Sharon Tate and the
Manson Murders" (2000): "El verdadero legado de Sharon no está en
sus trabajos de cine o televisivos. El hecho de que, a día de hoy, víctimas o
sus familiares puedan sentarse ante los autores del crimen y tener voz y voto
en sus sentencias o en sus peticiones de libertad condicional, es en gran
medida gracias al trabajo de Doris [y Patti] Tate. Los años de devoción hacia
la memoria de Sharon y su dedicación a los derechos de las víctimas... han
ayudado a transformar a Sharon de mera víctima y a restaurar un rostro humano a
uno de los crímenes más tristemente célebres del S. XX".
Hasta aquí, mis queridos, todo lo que tenía para contarles hoy. Me despido de ustedes con unas palabras de Roman Polanski: "Desde la muerte de Sharon y a pesar de poder parecer al contrario, mi disfrute de la vida ha estado incompleto. En momentos de tragedias personales insoportables algunos encuentran consuelo en la religión. En mi caso pasó lo contrario. Cualquier fe religiosa que tuviera se acabó con el asesinato de Sharon. Se vio reforzada mi fe en el absurdo".
Buenas tardes.