LA
POLILLA DEL TALENTO II: SÍNTOMAS DEL ENVIDIOSO
"Los
acres clamores de la envidia envenenan más mortalmente que la mordedura de un
perro rabioso."
William
Shakespeare
Buenas noches, caros
lectores. Heme aquí, firme como rulo de estatua, abocada a seguir ilustrándolos
acerca del peliagudo asunto de la envidia. Hemos visto ya tipos de envidia y
tipos de envidiosos. Hoy exploraremos los síntomas que delatan a esos envidiosos.
De nada.
SÍNTOMAS DEL ENVIDIOSO
Fue Napoleón Bonaparte quien enunció
una vez que la envidia es una declaración
de inferioridad. Y así es, mis queridos. Quien envidia le grita su
inferioridad al mundo. Hay envidiosos para nada sutiles y otros que envidian
amparados por las sombras de la noche. Por eso los síntomas del envidioso de
dividen en visibles e invisibles. Pasen y vean.
SÍNTOMAS VISIBLES
-CRITICA TUS ÉXITOS, TU ASPECTO FÍSICO, TUS
PERTENENCIAS O TU MODO DE VIDA: “Una demostración de
envidia es un insulto a uno mismo.” - Yevgeny Yevtushenko
El
envidioso se siente absolutamente
inferior al envidiado. Y esto le
resulta intolerable. Por eso se ensaña con todo lo que tenga que ver con tu
persona: va en detrimento de tus virtudes con el ladino fin de mermar tu inferida
superioridad. Un comportamiento mezquino y deleznable a todas luces. Pero que
este sátrapa no puede evitar. El sentimiento de inferioridad que lo embarga
hace que la crítica despiadada actúe como mecanismo
de defensa. Tus logros lo amenazan: él se defiende tratando de desmerecerlos. No enfoca sus esfuerzos en crecer: busca que decrezcas. No
pretende alcanzar los cielos donde planeás alegremente sino bajarte de un hondazo.
-BUSCA TUS ERRORES PARA RESALTARLOS: “La envidia es el gusano roedor del mérito y de la gloria.” –
Sir Francis Bacon
Otro
mecanismo muy recurrente en los envidiosos, amenazados por tu belleza, tu
talento o tu suerte, es monitorear como un radar envenenado cada aspecto de tu
vida buscando algún error para resaltar y poner de manifiesto que no sos ni tan
perfecto ni tan maravilloso. Nuevamente el
envidioso dirige sus acciones para hacerte decrecer, para mermar tu
superioridad y destruir tus éxitos.
-TRATA
DE OPACAR TUS ÉXITOS, TU ASPECTO FÍSICO, TUS PERTENENCIAS Y TU MODO DE VIDA: “La indignación moral no es más que envidia con aureola.” - George Herbert
Como el
envidioso no puede superarte y eso lo jode terriblemente, recurre, para hacerte
sentir inferior, a otras personas que, supuestamente, te superan. Amigas con el
culo menos caído que el tuyo a las que el modelo de vestido que te compraste
les queda muchísimo mejor. Primos lejanos que cobran muchísimo más que vos por
hacer el mismo trabajo. Vecinos cuyos hijos son mucho más educaditos que los
tuyos.
SÍNTOMAS INVISIBLES
-DESEA QUE TU FRACASO LLEGUE TARDE O TEMPRANO: “La envidia hace muecas, no se ríe.” – Lord Byron
El
envidioso sufre tanto por tus éxitos que
termina convirtiéndote en una parte esencial de su existencia. Toda su atención
se centra en tu persona y suele tenerte constantemente en la mira esperando la
gloriosa hora de tu fracaso. Vive pendiente de tus acciones y bienes, y cada
tanto le prende una vela a algún santito dudoso para que tu universo colapse
sin remedio. Le importa más verte morder el polvo que remontarse a los cielos.
-DISFRUTA TUS ERRORES O FRACASOS COMO SI FUERAN SUS ÉXITOS PERSONALES: “El envidioso enflaquece al ver la opulencia del prójimo.” - Horacio
-DISFRUTA TUS ERRORES O FRACASOS COMO SI FUERAN SUS ÉXITOS PERSONALES: “El envidioso enflaquece al ver la opulencia del prójimo.” - Horacio
El envidioso espera
pacientemente a que derrapes y vivencia tu caída como un estruendoso éxito
personal. Es tan, pero tan jodido, que
tiene un orgasmo cada vez que se entera de que algo te salió redondamente para
el traste.
-SI TIENE OPORTUNIDAD TRABAJA PARA TU FRACASO: “Antes habrá cuerpo sin sombra que virtud sin envidia.”
–Leonardo da Vinci
El
envidioso subordina enfermizamente parte de su felicidad a tu fracaso: en lugar
de utilizar su energía y su talento para alcanzar sus logros, los pone al
servicio de tu derrota. Supone erróneamente que eliminando tu éxito eliminará
también su infelicidad.
Hasta aquí, carísimos lectores, los síntomas más comunes de los envidiosos. Me despido de ustedes con unas palabras de Eva Perón que les vienen como anillo al dedo a todos los envidiosos a los que nuestros triunfos les quitan el sueño: "Lo único que los mueve es la envidia. No hay que
tenerles miedo: la envidia de los sapos nunca pudo tapar el canto de los
ruiseñores."
Buenas noches.
Fotografía: Anna Nicole Smith y Sky Nellor parodiando a Jayne Mansfield y Sophia Loren, Daniela Federici para GUESS (1993)
No hay comentarios:
Publicar un comentario