HOLLYWOOD PARANORMAL: BELA LUGOSI
"Imagino que me parezco a un lobo solitario. No digo que no me guste la gente en absoluto pero, para ser sincero, sólo me gusta si tengo una oportunidad de mirar en el interior de sus corazones y sus mentes."
Bela Lugosi
¿Quién puede
poner en duda que Bela Lugosi fue el
mejor Drácula de la historia del cine?
Seductor, elegante, misterioso, Lugosi
estaba convencido de que éramos las mujeres las fanáticas del terror: “Son las mujeres quienes aman el horror. Se
regodean con él. Se alimentan de él. Y el horror se nutre de ellas. Las mujeres
se estremecen, se encogen, gritan y siempre vuelven por más.”
Bienvenidos, amables lectores, a una nueva entrega de la saga “Hollyood
paranormal”, dedicada esta vez al incomparable Bela Lugosi.
BELA LUGOSI: UN POCO DE HISTORIA
Béla Ferenc Dezső Blaskó, conocido como
Bela Lugosi, nació un día entre el 20 y el 29 de octubre de 1882 en Lugoj, Banat,
región de la actual Rumania, pero en ese
momento perteneciente al Imperio
Austro-Húngaro. Fue el más pequeño de los cuatro hijos de un
empleado bancario. Profundamente infeliz en su
infancia, huyó de su hogar a los doce
años con el firme deseo de abrirse paso por sí mismo, sin depender de sus
padres.
Sus comienzos fueron muy duros: trabajó como
minero y luego se empleó en los tendidos de ferrocarril que conectaban las
distintas localidades de su país. Su hermana lo ayudó prestándole dinero y consiguiéndole
papeles de figurante en las representaciones del Teatro Szabadka.
De acuerdo con la rigurosa jerarquía de la
interpretación teatral a fines del XIX, Béla consiguió papeles cada vez más
complejos y extensos, obteniendo bastante éxito. Fue entonces cuando cambió su
nombre por el de Bela Lugosi, en homenaje a su pueblo natal. Sus primeras giras teatrales fueron muy duras.
Llegó a interpretar cuarenta roles distintos en una misma temporada. Su
repertorio era igual de extenso: melodramas románticos, operetas, comedias
bufas y drama histórico.
Su interpretación del galán protagonista en la obra de
William Shakespeare “Romeo y
Julieta”, llamó la atención de un agente teatral de Budapest,
que lo contrató en 1911. Al poco tiempo, Bela Lugosi era un actor
principal del Teatro Estatal Húngaro, pero su carrera se vio interrumpida por
el estallido de la Primera Guerra Mundial. Aún con la posibilidad de quedar exento del servicio activo, Bela decidió ir al
frente, con el grado de Teniente de Infantería.
Cuando la guerra concluyó, Lugosi volvió al
teatro. También incursionó en la incipiente industria del cine, utilizando el seudónimo de
Arisztid Olt, para no confundir a sus fans teatrales. Comenzó a militar
activamente en la izquierda de su país y fundó el Sindicato de Actores. En 1917 se casó con Ilona Szmik, matrimonio que concluyó en 1920, supuestamente por diferencias políticas con los padres de su esposa.
En 1919, tuvo que exiliarse debido a su actividad política. Su primera parada
fue a Alemania, y posteriormente los Estados Unidos, en 1921. Como no hablaba inglés, optó por formar una compañía de repertorio
que actuaba en idioma húngaro. Su primer papel teatral en lengua inglesa fue el
de apache en la producción de Broadway “The
Red Poppy”, en 1923. Lo hizo memorizando
fonéticamente el libreto.
En octubre de 1927 fue contratado para el
papel principal de otro montaje teatral de Broadway, “Drácula”, drama escrito
por Hamilton Deane y John Balderston adaptando la novela homónima de Bram Stoker.
Con maquillaje verde y una capa roja y negra, Bela
Lugosi personificó al vampiro por excelencia. Su pronunciación deficiente, en
lugar de ser un escollo, contribuyó a dar verosimilitud a su trabajo, aunque
algunas veces complicaba las réplicas de sus compañeros de reparto. La obra permaneció 33 semanas en cartel en el Fulton Theatre y luego inició una gira por
todo el país que consolidó la identificación de Lugosi con el siniestro Conde. En
1931, el director Tod Browning lo eligió para que diera vida a Drácula en una
producción cinematográfica. La película fue un éxito.
Contratado
por Universal Studios, Lugosi participó en los años siguientes en
varios títulos de terror: “Murders in the Rue Morgue” (“ El doble asesinato de la calle Morgue”, Robert Florey/Edgar G. Ulmer,/Eddie
Sutherland, 1932), “White Zombie” (“La legión de los hombres sin alma”, Victor Halperin, 1932), “Island
of Lost Souls” (“La isla de las almas perdidas”, Erle C. Kenton, 1933) y “The black cat” ("El gato negro", Edgar G. Ulmer, 1934). Bela Lugosi rechazó interpretar al
monstruo en “Frankenstein”
(James Whale, 1931), pero realizó un buen trabajo
interpretando al trastornado Ygor en dos secuelas, “Son of
Frankenstein” (“El hijo de Frankenstein”, Rowland V. Lee, 1939) y “Ghost of Frankenstein” (“El fantasma de Frankenstein, Erle C. Kenton,
1942), antes de
aceptar interpretar finalmente al monstruo en “Frankenstein
Meets the Wolf Man” (“Frankenstein y el hombre lobo”, Roy William Neill, 1943). Tuvo también un pequeño papel en la comedia
clásica “Ninotchka” (Ernst Lubitsch, 1939), junto a Greta
Garbo.
En muchos films, como “The Black Cat” y “Son
of Frankenstein”, Bela Lugosi compartió cartel con su mayor rival en el mundo del cine de
terror, Boris
Karloff. La actitud de Lugosi hacia Karloff es tema
de muchas y muy variadas opiniones entre los expertos e historiadores de cine.
Muchos de ellos hablan de un Lugosi resentido por el éxito y la habilidad de
Karloff para conseguir mejores papeles dentro de la escena del cine de terror,
mientras que otros sostienen que ambos
actores tenían una muy buena relación.
En 1929, Lugosi se casó con la rica viuda Beatrice Weeks, pero su esposa solicitó el divorcio cuatro meses más tarde, citando a la actriz Clara Bow, la chica It de Hollywood, como la otra mujer. En 1933, volvió a casarse, esta vez con Lillian Arch, hija de inmigrantes húngaros, de 19 años. Tuvieron un hijo, Bela G. Lugosi, que nació en 1938. Se divorciaron en 1953, en parte debido a los celos de Bela.
Tras
la Segunda Guerra Mundial, los gustos del público variaron, y los vampiros
europeos de Lugosi, aristocráticos y sofisticados, pasaron de moda. Bela se vio
forzado a aceptar papeles donde caricaturizaba sus terroríficos personajes. Recreó por última
vez el papel de Drácula en la película “Abbott and Costello Meet Frankenstein” (“Abbott y Costello contra Frankenstein”, Charles Barton, 1948). Cada vez más ocioso,
se dedicó a leer y coleccionar obras de arte. Aunque se hallaba muy unido a su
familia y a la comunidad húngara de Los Angeles, su fragilidad psicológica lo
llevó a hacerse adicto a la morfina, sustancia que
comenzó a utilizar durante su estancia en el frente de guerra para apaciguar el
dolor por la herida sufrida en una pierna.
En el final
de su vida, Lugosi volvió a aparecer en películas de dudosa calidad. El histórico
director Ed Wood, desde siempre un fanático del actor,
consiguió convencerlo para que participara en un pequeño
papel en su película “Glen or Glenda (“Glen o Glenda”, 1953), un docudrama acerca
del travestismo y la transexualidad, totalmente adelantado para su época pero considerado
por el crítico Leonard Maltin "posiblemente
la peor película jamás hecha".
Lugosi volvió
a interpretar a un científico loco en otra película de Wood, "Bride of the Monster” (“La novia del monstruo”, 1956). Su personaje fue el Doctor Eric Vornoff, un científico ruso con planes
absurdos para crear una raza superior y dominar al mundo.
Uno de los
papeles más famosos de Lugosi fue el que interpretó en una película ya clásica
que sería estrenada después de su muerte, también dirigida por Ed Wood. “Plan 9 from Outer Space” (“Plan 9 del espacio
exterior”, 1959) contenía metraje de Lugosi
intercalado con escenas de un doble que no se parecía para nada a él. Wood
había tenido enormes dificultades para financiar el proyecto, y sólo fue capaz
de filmar escenas cortas y mudas que planeaba incorporar en el montaje final
una vez que hubiese encontrado el resto de su financiación. Pero Lugosi
falleció tres años antes de que esto sucediera, así que Wood
contrató al quiropráctico de su esposa para doblar a Lugosi, al que podemos
distinguir del auténtico Drácula por el hecho de que no se
parece en nada a él y porque, además, se cubre la cara con una capa en cada
una de sus tomas.
Béla Lugosi falleció de un ataque al corazón a la edad de 73 años en Los Angeles, California, el 16 de
agosto de 1956.
Fue enterrado llevando puesto su traje de Conde Drácula, en
el Holy Cross Cemetery de Culver City, California.
Béla Lugosi es considerado uno
de los grandes actores clásicos del cine de terror, junto a Lon Chaney Jr. (como
el Hombre Lobo) y Boris Karloff (como El Monstruo de Frankenstein
y La Momia). Por su contribución al cine, fue galardonado con una estrella en
el legendario Paseo de la Fama, en el 6340 de Hollywood Boulevard.
La película biográfica “Ed Wood,” dirigida por Tim Burton en
1994, refleja la entrañable relación de Wood con Lugosi, interpretado magistralmente por Martin Landau,
que ganó por su actuación un premio Oscar como Mejor actor secundario.
LEYENDAS URBANAS
Son muchas las leyendas urbanas que han surgido alrededor de la mítica figura de Bela Lugosi. La más difundida cuenta que, en sus últimos años, el actor no distinguía claramente entre fantasía y realidad, y que creía ser el verdadero Conde Drácula. Se da por cierto que no salía durante el día porque creía que la luz del sol podía dañarlo, que dormía en un ataúd y hasta que se ofrecía a pagarles a algunas personas a cambio de que lo dejaran beber un poco de su sangre.
La leyenda cuenta, también, que sus últimas palabras fueron “¡Soy el Conde Drácula, rey de los vampiros! ¡Soy inmortal!”, y que lo enterraron llevando puesto su traje del Conde, porque así lo había especificado en su testamento.
Con respecto a su funeral, se dice que fue pagado por Frank Sinatra. Y que, cuando dos iconos del terror como Vincent Price y Peter Lorre asistieron al funeral de Béla Lugosi y lo vieron dentro de su ataúd ataviado como el Conde Drácula, Lorre le dijo a Price: "¿Crees que deberíamos clavarle una estaca en el corazón por si acaso?".
En realidad, Bela Lugosi, a pesar de tener cierta fragilidad psíquica que desembocó en su adicción a la morfina, jamás creyó ser el Conde Drácula. Murió mientras dormía, alrededor de las 6:45 PM del jueves 16 de agosto de 1956. Su cuerpo fue descubierto por su quinta esposa, Hope, en su apartamento en 5620 Harold Way, en Los Angeles, cuando regresó de su trabajo. Sus últimas palabras seguramente fueron cotidianas e intrascendentes, como las últimas palabras de la mayoría de los seres humanos.
Bela Lugosi sabía que no era inmortal. Su esposa Hope declaró a la prensa: "La muerte lo aterrorizaba. Hacia el final estaba muy cansado, pero todavía tenía miedo de la muerte. Tres noches antes de morir, estaba sentado en el borde de la cama. Le pregunté si todavía tenía miedo. Me dijo que sí. Hice todo lo posible para consolarlo, pero es imposible con gente así. Siempre van a tener miedo a la muerte."
Bela Lugosi fue enterrado con su traje de Conde Drácula a petición de su hijo Béla Jr. y su ex esposa Lillian Arch, quienes consideraron
que él lo hubiese deseado así.
La historia acerca de Vincent Price y Peter Lorre en el funeral de Bela Lugosi es totalmente falsa. Ninguno de los dos actores asistió a la Utter-McKinley Mortuary Chapel el 18 de agosto de 1956. En realidad, fueron muy pocos los que asistieron: Hope, Lillian y Béla Jr.; los directores húngaros Zoltan Korda y Steve Sekely; Scotty Beale (director adjunto de "Drácula", "Murders in the Rue Morgue" y "The Raven"); Robert Boyle (director de arte asociado en "The Wolf Man"); el cineasta Ed Wood, su esposa Kathy y su ex esposa Norma McCarty; el productor de "Glen or Glenda", George Weiss; Forest J. Ackerman (editor de la revista Famous Monsters of Filmland); Don Marlowe, uno de sus antiguos representantes; y los actores y actrices Tor Johnson y Paul Marco ("Bride of the Monster” y “Plan 9 from Outer Space”), Carroll Borland ("Mark of the Vampire"), Conrad Brooks y Dudley Manlove (“Plan 9 from Outer Space”) y Loretta King ("Bride of the Monster”).
Frank Sinatra no pagó el funeral de Béla Lugosi. Fue Lilian Arch quien se hizo cargo de los gastos. Hope Lininger pagó el ataúd.
EL DEPARTAMENTO DE BELA LUGOSI
Bela Lugosi falleció en un sencillo departamento cerca de Western Avenue. Lugosi solía caminar diariamente hacia su tienda
favorita de cigarrillos en el 6423 de Hollywood Blvd. Cuando el coche fúnebre
con el cuerpo del actor se trasladó desde su casa a la Utter-McKinley Mortuary Chapel , donde dos días más tarde se celebraría su funeral, el chofer perdió inexplicablemente el control
del vehículo y no pudo recobrarlo hasta que pasó la tienda de cigarrillos. Para muchos esa fue la despedida de Bela Lugosi. De los cigarrillos y de Hollywood.
El departamento donde vivió y murió Bela Lugosi es un punto de interés para todos los tours fantasmales que recorren la Meca del Cine.
Hasta aquí, amables lectores, esta entrega de "Hollywood paranormal" dedicada a Bela Lugosi. Escrita con el mismo esmero con el que se escriben las cartas de amor: siempre adoré a este hombre. Me despido de ustedes con una reflexión de David J. Skal, uno de los principales estudiosos
de la cultura del horror, autor de numerosos ensayos sobre el tema, incluyendo “Hollywood gótico: la enmarañada historia de
Drácula”: “Drácula es un personaje que cambia de forma, pero no sólo en el
sentido de convertirse en murciélago. También adquiere formas culturales y es
capaz de ser cualquier cosa para cualquier persona. En ese sentido, me gusta pensar que Drácula es el «político perfecto». A diferencia de otros monstruos, el aspecto exterior de
Drácula parece normal, incluso atractivo. Sin embargo, representa un amplio
espectro de todos aquellos impulsos que poseen los seres humanos aunque no los
reconozcan directamente. Drácula alcanza la inmortalidad recurriendo a nuestros
propios secretos.”
Buenas noches.
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