jueves, 28 de mayo de 2020

HOLLYWOOD PARANORMAL: JOAN CRAWFORD


HOLLYWOOD PARANORMAL: JOAN CRAWFORD

"“Si vas a ser una estrella, tienes que parecerlo y no puedes salir a la calle si no vas vestida como debería ir Joan Crawford, la estrella de cine. Si quieres ver a la vecina de al lado, entonces vete a la puerta de al lado.”."
Joan Crawford

Fue una de las malas malísimas más famosas del cine y, gracias al libro "Mommie Dearest", escrito por su hija Christina, se convirtió en el prototipo de la madre desquiciada.  Cuarenta años después de su muerte, la serie de televisión "Feud", que retrata su rivalidad con Bette Davis, la puso nuevamente en boca de todos. Joan Crawford, ¿bruja o embrujada?


JOAN CRAWFORD: UN POCO DE HISTORIA

Lucille Fay Le Sueur, conocida como Joan Crawford, nació en San AntonioTexas, el  23 de marzo de 1904, en una familia modesta. Su padre, Thomas Le Sueur, de origen francocanadiense, abandonó la familia antes del nacimiento de Crawford. Tiempo después, su madre, Anna Bell, de origen sueco, contrajo matrimonio en segundas nupcias con Henry Cassin, empresario de teatro, lo que mejoró ostensiblemente la economía y la vida de la pequeña Lucille. Tenía dos hermanos mayores, Daisy LeSueur, que falleció muy joven, y Hal Hays LeSueur, nacido en 1903.
El baile fue su primera vocación y en 1921 debutó en el coro de la revista de Katherine Emerine. En 1925 ganó un concurso de danza que facilitó su lanzamiento como actriz por la "Metro Goldwyn Mayer", en un principio únicamente como doble de Norma Shearer. Participó luego en varias películas mudas en la década del '20. En ese entonces, era considerada una flapper, joven de conducta poco convencional y atuendos raros, muy avanzada en sus relaciones amorosas.​ Al contrario que otras divas de la época, como Mary Pickford Lillian Gish, Joan pudo adaptarse al naciente cine sonoro, y su matrimonio con Douglas Fairbanks Jr.el 3 de junio de 1929, impulsó su carrera. 
Durante las décadas de 1930, 1940 y 1950, Joan Crawford se convirtió en una de las actrices más aclamadas del cine de Hollywood y en una de las mejores pagadas de su tiempo. A mediados de la década del '40 ganó el Oscar a la Mejor actriz por su actuación en la película  "Mildred Pierce" (Michael Curtiz, 1945). Contrajo matrimonio con el presidente de la compañía "Pepsi Cola", Alfred Steele, y después de la muerte de su marido, dirigió durante un tiempo de la compañía. Continuó trabajando regularmente durante la década del '60,  y después de protagonizar  "Trog" (Freddie Francis) en 1970, se retiró definitivamente de la gran pantalla.
Su última aparición pública fue el 23 de septiembre de 1974 en Nueva York, en una fiesta en honor a su vieja amiga Rosalind Russell, quien estaba enferma de cáncer de mama. Joan Crawford falleció el 10 de mayo de 1977 en dicha ciudad, aparentemente a causa de un infarto, aunque llevaba tiempo padeciendo cáncer de páncreas.  "Algunas personas creen que tomó algún medicamento para acabar con su vida, tal vez pastillas para dormir, pero no se ha podido demostrar. Hay, no obstante, un hecho revelador. Una semana antes de su muerte regaló a su perro, al cual adoraba", contó  su biógrafa Karen Swenson. La leyenda cuenta que, mientras agonizaba, sus últimas palabras fueron dirigidas en tono desafiante hacia su criada, que rezaba en voz alta al pie de la cama: "¡Maldita sea!... No te atrevas a pedirle a Dios que me ayude".


MAMITA QUERIDA

Joan Crawford se casó cuatro veces y tuvo infinidad de amantes, desde galanes consagrados hasta actores de reparto, incluso jovencitos a los que se encargó de iniciar, como la estrella infantil Jackie Cooper. Su furor sexual era legendario, tal como lo recordó el director Vincent Sherman: “Estábamos en la sala de proyecciones cuando ella cogió mi mano y la puso en su pecho. De repente se quitó la falda y se bajó las bragas. Estaba lista para tener sexo en ese mismo momento. Tenía fama de devora hombres”.
En 1940, cuando tenía 35 años y acababa de divorciarse de su segundo marido, la actriz adoptó a su primera hija,  Christina.  Le siguieron luego otros tres niños: Christopher, y las gemelas Cathy y Cyndi. En 1978, Christina Crawford escribió un escalofriante libro titulado "Mommie Dearest", en el que la describe como una mujer colérica, maltratadora de sus hijos y obsesionada con la limpieza. Joan Crawford se mostraba en los medios como una madre devota y cariñosa pero, aparentemente, maltrataba a sus hijos. En su libro, Christina habla de la obsesión de Joan con las perchas de metal y de sus incursiones nocturnas cuando, por cualquier motivo, se presentaba en mitad de la noche en la habitación de la niña y la golpeaba. También cuenta cómo ataba con correas a su hermano Christopher y narra momentos truculentos como aquellos en los que la actriz llamaba a la prensa para hacerles abrir a ella y a sus hermanos los regalos de Navidad delante de los paparazzi. Una periodista recordaba que era “la cosa menos espontánea” que había visto en su vida.
Una de las últimas decisiones que tomó Joan antes de morir fue la de desheredar a sus hijos Christina y Christopher. En su testamento no daba muchas explicaciones. Simplemente decía: “Los motivos ya los conocen ellos”. Fue ese detalle lo que animó a Christina Crawford a escribir su libro, en el que se basó la película "Mommie Dearest" (Frank Perry, 1981), en la que Joan fue interpretada por Faye Dunaway.
Como contracara de lo expresado por Christina, las gemelas Cathy y Cindy afirmaron públicamente que su hermana mayor era una mentirosa e insistieron en que Joan era una madre cariñosa, exigente pero nunca maltratadora.


LA CASA EMBRUJADA DE JOAN CRAWFORD 

Sherry Hansen-Steiger y Brad Steiger, autores paranormales, escucharon en 1989 rumores acerca de la casa de Joan Crawford en Brentwood, California, a la que se señalaba como embrujada. Entrevistaron a su hija Christina y la mujer afirmó que de, en su infancia, había visto en la mansión fantasmas de niños y escuchado extrañas voces que provenían de las paredes, y que en la casa había zonas frías en las que nadie se atrevía a entrar.  Christina contó que no había vuelto al lugar desde que tenía 17 años: "Fue entonces cuando fui a la universidad [en 1956], en ese momento, Crawford todavía era dueña de la casa".
Según Christina, todas las personas que vivieron en la casa después de Joan Crawford tuvieron problemas, incluyendo enfermedades graves y adicciones.  A fines de la década del '80, los dueños de la mansión convocaron a la clarividente Rosalyn Bruyere del "Healing Light Center" para que hiciera una limpieza del lugar. "Es cierto que la casa sufrió incendios espontáneos, principalmente en el muro detrás de donde solía estar la cama de Joan Crawford", contó Bruyere. "Sin embargo, no sentí que el fantasma de Joan Crawford estuviera allí".  La psíquica opinó que la casa había sido maldecida de alguna manera antes de que Crawford se mudara al lugar, y que el mal en ella había aumentado la neurosis de Joan. Bruyere afirmó que algunas personas habían sido torturadas en la casa, y que sus fantasmas continuaban rondándola como almas en pena.
“Era un lugar muy negativo. Lo llamé un 'Centro Astral', una especie de reunión de espíritus que fueron atraídos por las vibraciones negativas”, dijo Rosaly a los medios de comunicación. Pero la teoría de que el espíritu de Joan Crawford no estaba en la casa no contentó a todos, ya que algunas personas afirmaron haber tenido encuentros fantasmales con la actriz fallecida en la mansión de Brentwood.
Hasta aquí, mis queridos, todo lo que tenía para contarles hoy. Me despido de ustedes con unas palabras de la indomable Joan: "Me gustaría ser un gorila anciano o un elefante. He oído que cuando saben que han llegado a sus últimos días se alejan para estar solos y sencillamente desaparecer. En lo que a mí respecta, es una gran idea".
Buenas noches.

miércoles, 20 de mayo de 2020

HOLLYWOOD PARANORMAL: CLARK GABLE Y CAROLE LOMBARD


HOLLYWOOD PARANORMAL: CLARK GABLE Y CAROLE LOMBARD

"Vivo según un código de hombres diseñado para encajar en un mundo de hombres. Sin embargo, nunca olvido que el primer deber de una mujer es elegir el color de labios apropiado."
Carole Lombard

Fueron una de las parejas más célebres de Hollywood, pero la trágica muerte de ella los separó prematuramente. Sin embargo, la leyenda cuenta que Carole Lombard y Clark Gable volvieron a encontrarse cuando el falleció, para revivir una y otra vez su noche de bodas en Arizona. 



CLARK GABLE: UN POCO DE HISTORIA

William Clark Gable nació en Cádiz, Ohio, el 1 de febrero de 1901.  Su madre murió cuando tenía sólo siete meses de edad. A los 16 años dejó el colegio y se fue a trabajar a una fábrica y, después de asistir a una función teatral en la que vio una obra que lo impresionó, decidió convertirse en actor. Comenzó a realizar giras con compañías teatrales modestas, y trabajó también como vendedor y en diferentes industrias para ganarse el sustento.
En 1924 fue a Hollywood con la ayuda financiera de una agente de teatro, Josephine Dillon, que se convirtió en su manager. Luego de interpretar pequeños papeles, consiguió, en 1930, un contrato con la "Metro-Goldwyn-Mayer".
En 1934, Clark Gable ganó un Oscar al Mejor actor principal por “It happened one night” (Frank Capra), premio al que ya había sido nominado en 1935 por "Mutiny on the Bounty" (Frank Lloyd). Sin embargo, su papel más recordado es el de  Rhett Butler en el clásico del cine "Gone with the Wind" (Victor Fleming, George Cukord, Sam Wood, 1939). En la piel de Butler, Gable pronunció la que fue considerada, la mejor frase cinematográfica por el "American Film Institute" en el año 2005: "Frankly, my dear, I don't give a damn" ("Francamente, querida, me importa un bledo").
En 1939, se casó con la actriz Carole Lombard, de la que enviudó tres años después. 
En 1960, Clark Gable protagonizó su último papel en la mítica película "The Misfits" (John Huston), junto a Marilyn Monroe y Montgomery Clift. Su rodaje concluyó el 4 de noviembre de 1960. Dos días después, Clark Gable sufrió una trombosis coronaria y tras una aparente recuperación, la repetición del ataque cardíaco diez días más tarde provocó su fallecimiento el 16 de noviembre de 1960, en Los Ángeles. Tenía 59 años.
"The Misfits" se estrenó el 1 de febrero de 1961, y también fue la última película en la que participó Marilyn Monroe. 


CAROLE LOMBARD: UN POCO DE HISTORIA

Jane Alice Peters, conocida como Carole Lombard, nació en en Fort Wayne, Indiana, el  6 de octubre de 1908. Después de que el director de cine Allan Dwan la viera jugando al béisbol en la calle con los niños del barrio, Carole firmó un contrato para la película "A Perfect Crime" en 1921, con sólo 12 años de edad. A los 15, abandonó la escuela, se unió a una compañía teatral y actuó en varios espectáculos que no tuvieron grandes repercusiones en los medios. En 1925, pasó una prueba cinematográfica y firmó un contrato con la "20th Century Fox".
En 1931, Carole formó pareja con William Powell, con el que se casaría posteriormente, en "Man of the World" (Richard Wallace, Edward Goodman). En 1932, "No Man of her Own" (Wesley Rugglesunió a Carole y a Clark Gable por primera y única vez. En aquel entonces estaba en los estudios "Paramount" y era una de sus estrellas. La pareja se casó en 1939.
Su última película "To Be or Not to Be", dirigida por Ernest Lubitsch, en la que interpretó a la ficticia actriz de teatro polaca Maria Tura, fue su último gran éxito y según la crítica, el mejor de sus films.  Lamentablemente, Carole no vivió para ver su estreno. Falleció en un accidente de aviación el 16 de enero de 1942. Tenía 33 años.


CLARK Y CAROLE, LA HISTORIA DE AMOR

Clark Gable y Carole Lombard se conocieron en 1932, durante la filmación de "Nobody of Own". En ese momento, Clark, de 31 años, estaba casado con Maria Langham. Carole, de 24, tenía un matrimonio infeliz con el actor William Powell. "[Hicimos] todo tipo de escenas de amor... y nunca temblé por él en absoluto", relataría más tarde Lombard al director Garson Kanin, quien citó sus palabras sobre Gable en su libro de 1976, "Hollywood: Stars and Starlets, Tycoons, Moviemakers, Frauds, Hopefuls, Great Lovers". Etrictamente profesionales, el galán y la actriz mejor pagada no permitieron que se desarrollara una relación romántica entre ellos en ese momento. 
Cuatro años más tarde, Clark y Carole se reencontraron en el "Mayfair Ball". Coquetearon toda la noche y se fueron juntos, a pesar de que la ya divorciada Lombard había ido al baile con Cesar Romaro y Gable técnicamente aún estaba casado, aunque separado. Cuando el actor la invitó a su habitación de hotel, la rubia bromeó: "¿Quién te crees que eres, Clark Gable?"
Poco tiempo después, la pareja ya era inseparable. Un artículo en la edición de abril de 1942 de la revista "Photoplay" decía que desde la noche del baile hasta la muerte prematura de Lombard, el tramo más largo que pasaron sin verse fue de sólo seis días. Su relación fue secreta hasta 1938, cuando el divorcio de Gable finalmente se concretó.
El 29 de marzo de 1939, mientras Gable estaba en un descanso de la filmación de "Gone with the Wind", la pareja se fugó en Kingman, Arizona. En las afueras de Los Ángeles se detuvieron en una florería y Clark compró dos claveles rojos para su ojal y un ramo de lilas y rosas para Carole. Cuando llegaron a Kingman, fueron directamente a la alcaldía para conseguir su acta matrimonial, y luego se casaron en la iglesia.  Carole declaró luego que ella planeaba trabajar unos años más y luego tener familia. “Dejaré a Pa que sea la estrella y yo me quedaré en casa, zurciré calcetines y cuidaré a los niños”.


EL ACCIDENTE

En diciembre de 1941, cuando Estados Unidos entró en la Segunda Guerra Mundial después del ataque japonés a Pearl Harbor, el gobierno solicitó a los más importantes actores norteamericanos que colaboraran con la causa. Muchas estrellas de la gran pantalla se involucraron en la venta de Bonos de Guerra para recaudar fondos para el ejército. Franklin D. Roosevelt le pidió a Clark Gable que colaborara, pero el actor no pudo hacerlo  por cuestiones de trabajo. Lombard, que se sentía orgullosa de ser estadounidense, pese a sus orígenes británicos y alemanes, aceptó la propuesta de Roosevelt.
El 12 de enero de 1942, Carole, su madre Elizabeth Peters y el publicista de la "MGM", Otto Winkle, viajaron en tren desde Los Ángeles hasta Indiana. Al llegar, la actriz recibió una calurosa bienvenida. En sólo quince horas, Carole logró vender dos millones de dólares en bonos. Los Bonos de Guerra, creados por el Departamento del Tesoro de EE. UU., permitieron a los estadounidenses invertir en el esfuerzo bélico y en su propio futuro, ya que  respaldaron la guerra en el corto plazo pero podían ser cobrados por su valor completo una década más tarde. Para regresar a su casa más rápido, Lombard decidió cambiar el tren por el avión. Según Robert Matzen, autor de "Fireball: Carole Lombard and the Mystery of Flight 3" (2013), su prisa por llegar junto a su esposo se debió a un posible romance entre Gable y la joven Lana Turner.
Una leyenda dice que la madre de la actriz, que creía en la numerología, no quería volar porque pensaba que los números eran desfavorables, ya que el 3 se repetía demasiadas veces. El avión era un Douglas DC-3, el vuelo era el Nº3, ellos formaban un grupo de tres personas y Carole tenía 33 años. Otra historia asegura que antes de dejar HollywoodCarole y su madre visitaron a una vidente a la que ocasionalmente veían y la mujer le advirtió a la actriz: "Manténgase fuera de los aviones en 1942. Hay peligro en ellos para usted". Lo cierto es que la nave que abordó la actriz acabó estrellándose Table Rock Mountain, a las afueras de Nevada, el 16 de enero de 1942. No hubo sobrevivientes. 
Al parecer, la escasa iluminación terrestre ocasionó que el piloto desviara la nave y por accidente se incrustara en la montaña. Pero algunos pusieron en duda esta versión oficial. Orson Wells se atrevió a decir: “Adoraba a Carole. Fue una amiga muy cercana. ¿Sabes por qué cayó su avión?. Estaba lleno de grandes físicos americanos, lo derribaron los nazis. Ella era una de las civiles a bordo. El avión estaba lleno de agujeros de bala”.


DESPUÉS DE LA MUERTE DE CAROLE

Gable fue trasladado a Las Vegas después de enterarse de la tragedia para reclamar los cuerpos de su esposa, suegra y Winkler, quien además de ser su agente de prensa, había sido un amigo cercano. El funeral de Lombard se celebró el 21 de enero en el cementerio "Forest Lawn Memorial Park" en Glendale, California. Fue inhumada junto a su madre bajo el nombre de Carole Lombard Gable.
La última película de Carole Lombard, "To Be or Not to Be", una sátira sobre el nazismo y la Segunda Guerra Mundial, estaba en postproducción en el momento de su muerte. Los productores de la película decidieron cortar la escena en la que el personaje de Lombard preguntaba "¿Qué puede pasar en un avión?" debido a las trágicas circunstancias de su muerte.  Cuando se estrenó la película, recibió críticas mixtas, particularmente por su controvertido contenido, pero la actuación de Lombard fue aclamada como la despedida perfecta de una de las estrellas más importantes de Hollywood en la década de 1930.
En el momento de su muerte, Carole Lombard había sido fichada para protagonizar la película "They All Kissed the Bride"  (Alexander Hall, 1942), que luego interpretó Joan Crawford. Crawford donó su salario a la Cruz Roja, fundamental en la recuperación de los cuerpos del accidente aéreo.
El 12 de agosto de 1942, Gable, que estaba desolado por la muerte de su esposa, se enroló en las Fuerzas Aéreas Americanas. Tras pasar por la "Escuela de Candidatos a Oficiales" en Miami y la "Escuela de Artillería", formó parte de la "FMPU" ("First Motion Picture Unit"), una unidad del ejército encargada de realizar películas de propaganda y de entretenimiento. Fue asignado al 351 Grupo de Bombardeo en la base inglesa de Polebrook y allí filmó la película "Combat America". Entre toma y toma, participó en misiones de combate a bordo de un Bombardero B-17. 
Luego de su incursión en la Fuerza Aérea, Gable regresó a Hollywood. 
Cuando el actor falleció, el 16 de noviembre de 1960, fue enterrado junto a Carole, cumpliéndose así su voluntad. Se había casado dos veces más, pero nunca logró olvidarla. 


LOS FANTASMAS

En la ciudad de Oatman, Arizona, se encuentra el "Oatman Hotel". El 29 de marzo de 1939 Clark Gable y Carole Lombard pasaron su noche de bodas allí después de haberse casado en Kingman. Recordando esta memorable noche, la pareja a menudo regresaba al hotel. Después de su muerte, Carole comenzó a ser vista en el "Oatman", en la habitación que compartió con su esposo. Desde la muerte de Gable ambos han sido vistos en el hotel. Los pasajeros y el personal del establecimiento a menudo han escuchado a la pareja susurrando y riendo en la habitación cuando está vacía. Según un informe, cuando un fotógrafo profesional tomó una foto del cuarto sin huéspedes, pudo captar la figura fantasmal de un hombre.

Hasta aquí, mis queridos, todo lo que tenía para contarles hoy. Me despido de ustedes con unas palabras del gran Clark Gable, con las que siempre me sentí muy identificada: "No quiero a un montón de extraños mirando desde arriba mis arrugas y mi barriga gorda cuando esté muerto".

Buenas noches.

miércoles, 13 de mayo de 2020

LAS VERDADERAS HISTORIAS DETRÁS LOS CUENTOS INFANTILES: PINOCHO


LAS VERDADERAS HISTORIAS DETRÁS LOS CUENTOS DE HADAS: PINOCHO

"De vez en cuando di la verdad para que te crean cuando mientes."
Jules Renard

Buenas tardes, amables lectores. Les traigo hoy una nueva entrega de la saga “Las verdaderas historias detrás de los cuentos infantiles”, dedicada esta vez al famoso niño de madera, Pinocho.


PINOCHO

"Las aventuras de Pinocho" ("Le avventure di Pinocchio") es una obra literaria escrita por el autor italiano Carlo Collodi. Fue publicada en Italia en el periódico "Giornale per i bambini" entre 1882 y 1883, con el título "Storia di un Burattino" ("Historia de un títere") e  ilustrada por Enrico Mazzanti.
"Las aventuras de Pinocho" es una de las obras más leídas a nivel mundial y cuenta con traducciones a más de doscientos cincuenta idiomas y dialectos, incluyendo al sistema de lectura braille. La obra también se ha convertido en uno de los libros más vendidos de todos los tiempos. Desde su primera publicación, la novela ha dado lugar a diversas adaptaciones a lo largo del tiempo, entre las que se incluyen grabaciones de audio, obras de teatro, películas, ballets y obras de ópera.


UNA MARIONETA INSOPORTABLE Y UNA HISTORIA MUY VIOLENTA

El Pinocho creado por Carlo Collodi dista mucho de ser la marioneta adorable de la película de Walt Disney. La imagen original de Pinocho es la de un ser de madera poco muy elaborado, un niño de palo que vaga por las calles, pobre, hambriento, mentiroso, avaro, sin escrúpulos ni emociones. Collodi no lo concibió como un ser ingenuo y curioso, sino como una suerte de encarnación del espíritu infantil más malcriado e insoportable
La marioneta golpea y humilla a Geppetto, provoca el encarcelamiento del anciano, achaca sus culpas a otros, escupe el alimento que le dan, vende lo que con esfuerzo le compran y, en general, es ingrato y miserable.
Pinocho llega a la vida de Geppetto para complicársela. Collodi nos dice que el anciano "entristece y se pone melancólico, como nunca antes había estado en su vida."
El niño de madera no acepta ningún tipo de crítica o corrección: de hecho, en una oportunidad el grillo parlante del cuento, al que todos conocemos como Pepe Grillo gracias a Disney, advierte a la díscola marioneta de su mal comportamiento y el muñeco reacciona violentamente: “Al oír estas últimas palabras, Pinocho se levantó enfurecido, agarró del banco un martillo y lo arrojó contra el Grillo parlante. (…) Lo alcanzó en toda la cabeza, hasta el punto que el pobre Grillo casi no tuvo tiempo para hacer cri-cri-cri, y después se quedó en el sitio, tieso y aplastado contra la pared. ¡Muerto!” 
Pinocho no siente ningún tipo de remordimiento por el asesinato que cometió y le asegura a Geppetto que el Grillo había tenido la culpa de todo y que él no tenía la intención de matarlo
Después de este episodio el karma castiga a PinochoDurante una noche de tormenta, el muñeco sale a mendigar, pero los vecinos no le dan nada y uno le tira un balde lleno de agua encima. Pinocho vuelve a su casa mojado y sin comida, se sienta cerca del fuego del hogar para secarse y se queda dormido. Sus piernas se queman y se convierten en cenizas.
Geppetto golpea la puerta repetidas veces y grita para que Pinocho le abra, pero éste le contesta que no puede caminar. El anciano no le cree, pero logra entrar y ve que sus piernas están totalmente quemadas, por lo que se las reconstruye.
Más adelante Pepe Grillo vuelve a aparecer en la historia, en forma de fantasma, para decirle a Pinocho que no se fíe de unas personas que afirman que hay un monte mágico donde el dinero crece si lo siembras. Pinocho, una vez más, vuelve a ignorar el consejo del Grillo, lo que lo lleva a caer en las garras de dos ladrones que terminan ahorcándolo: "Y corrieron tras de mí y corrí y corrí, hasta que al fin me atraparon y me ataron el cuello con una cuerda y me colgaron de un árbol, diciendo: ‘Mañana volveremos por ti y estarás muerto y tu boca estará abierta, y luego tomaremos las piezas de oro que has escondido bajo la lengua".
En un principio Collodi había planeado que la historia de Pinocho terminara con esta cruel escena. La idea era transmitir el mensaje de que los niños que eran desobedientes podían terminar muy mal. Sin embargo, el editor del "Giornale per i bambini", le pidió al autor que continuara el relato, esperando un desenlace más feliz. Aparece, entonces, el Hada Azul, que llega para salvar a la marioneta (y que, al igual que el Grillo, morirá y reaparecerá más tarde).
Después de muchas peripecias, Pinocho aprende la lección y se decide a ayudar y cuidar a su padre. Aunque antes de este final conveniente casi fríen al personaje en una sartén y lo convierten en burro.


EL HADA AZUL

El Hada Azul aparece por primera vez en la historia en el capítulo XVI,  el primero que tuvo que añadir Collodi a pedido del editor del "Giornale per i bambini": es el personaje que lo salva antes de morir luego de que lo colgaran en una encina.
En el capítulo XV, aparece una versión previa de este personaje, pero no como un hada, sino como una misteriosa niña de pelo azul que vive en una casa en el bosque a la que acude Pinocho pidiendo auxilio, cuando el gato y el zorro lo persiguen. La niña en cuestión habla con una voz fantasmal y se niega a abrirle la puerta a Pinocho, argumentando que adentro de la casa “están todos muertos”, ella incluida. El Hada Azul se habría quedado en el fantasma misterioso de una niña, si Collodi no se hubiera visto obligado a alargar su novela y a cambiar el trágico final original.


EL HOMÚNCULO

La historia de Pinocho parece estar fuertemente influenciada por la cultura alquímica, principalmente por el concepto del homúnculo, un ser al que los alquimistas creían poder dotar de vida a partir de materia inanimada.
Se cree que el término fue usado por primera vez por el alquimista Paracelso, quien una vez afirmó haber creado un homúnculo al intentar encontrar la piedra filosofal que otorgaba la juventud eterna. 
Aparentemente, la criatura no medía más de 30 centímetros de alto y hacía el trabajo normalmente asociado con los golems. Sin embargo, tras poco tiempo, el homúnculo se volvía contra su creador y huía. La receta para crearlo incluía una bolsa de carbón, mercurio, y fragmentos de piel o pelo de cualquier humano o animal del que el homúnculo sería un híbrido. Todo esto debía enterrarse rodeado de estiércol de caballo durante cuarenta días, tiempo en el cual el embrión estaría formado en el seno de la Tierra.
Hay también otras recetas para la creación del homúnculo. Una de ellas implicaba usar mandrágora. Las creencias populares sostenían que esta planta crecía donde caía al suelo el semen que los ahorcados emitían durante las últimas convulsiones antes de la muerte. Además, su raíz tiene una forma vagamente parecida a un ser humano. La raíz  debía ser recogida antes del amanecer de una mañana de viernes por un perro negro, siendo entonces lavada y alimentada con leche y miel y, en algunas recetas, sangre, hasta que se desarrollara un humano en miniatura.
Un tercer método, citado por el Dr. David Christianus en la Universidad de Giessen durante el siglo XVIII, era tomar un huevo puesto por una gallina negra, practicar un pequeño agujero en la cáscara, reemplazar una porción de clara del tamaño de una alubia por esperma humano, sellar la abertura con pergamino virgen y enterrar el huevo en estiércol el primer día del ciclo lunar de marzo. Tras treinta días surgiría del huevo un humanoide en miniatura que ayudaría y protegería a su creador a cambio de una dieta regular de semillas de lavanda y lombrices.
Se dice que los homúnculos ansían transformarse en seres humanos reales y no ser meras imitaciones, deseo que encaja perfectamente en la historia de Pinocho, convirtiendo a Geppetto en la metáfora de un alquimista. 


PINOCHO, UN CUENTO MASÓN

Algunos investigadores hablan de la influencia de la Masonería en “Las aventuras de Pinocho”. Al igual que muchos literatos, Carlo Collodi ingresó a la Masonería a mediados del siglo XIX. Esta organización fue otra influencia importante en la obra del escritor.
El presidente del Centro de Estudios Históricos de la Masonería Española, José Miguel Delgado Idarreta, reafirma esta teoría citando, entre otras cosas, que Pinocho descubre que "el camino correcto se alcanzaba a través del conocimiento y la sabiduría". "Lo que había sido un tronco de madera y luego una marioneta, se convirtió finalmente en una persona real, tras superar las adversidades que se le presentaron", indica Delgado.  
Collodi muestra a través de esta historia una alegoría sobre la formación de las personas basada en el honor, la verdad y la virtud.


EL SÍNDROME DE PINOCHO

El Síndrome de Pinocho, se conoce en psiquiatría como mitomanía, mentira patológica o pseudología fantástica, y se utiliza para nombrar el comportamiento de los mentirosos compulsivos o habituales.
La mitomanía fue descripta por primera vez en la literatura médica en 1891 por Anton Delbrueck. A pesar de ser un tema controvertido, la mentira patológica se ha definido como una invención inconsciente y demostrable de acontecimientos muy poco probables y fácilmente refutables.
No todas las personas que mienten padecen este síndrome. Algunos mienten conscientemente para conseguir un beneficio, pero el mentiroso patológico no miente con una intención. Sus mentiras son espontáneas y no planeadas, y una vez entrada en esta dinámica de farsa y engaños no puede parar.

Hasta aquí, amables lectores, todo lo que tenía para contarles acerca de la famosa obra de Carlo Collodi. Me despido de ustedes con un poema de la cubana Carilda Oliver Labra dedicado a Pinocho:

VII
Sueña con el sabor
que deben de tener
las peras.
¿Y cómo será
el de una boca?
No puede saberlo:
de amarga resina
son sus lágrimas.
¿Conocerá alguna vez
una caricia suave?
Ha nacido sin carne
y no tiene
un corazón
para su angustia.
Es pura ansiedad
gastada en sueños.

Buenas tardes. 


Ilustración 1: Sara Fanelli
Ilustración 2: Gina Maldonado
Ilustración 3: Alessandra Liberato
Ilustración 4: Rosaria Battiloro
Ilustración 5: Daria Palotti
Ilustración 6: Lucia Rafanelli
Ilustración 7: Enrico Pennazza