PELÍCULAS DE TERROR Y CRÍMENES INSPIRADAS EN HECHOS REALES VI

PELÍCULAS DE TERROR Y CRÍMENES INSPIRADAS EN HECHOS REALES VI

"Cuando un cadáver sale del agua, muchas veces hay hojas y cosas en la boca."

"The Silence of the Lambs" ("El silencio de los inocentes", 1991)

A casi sesenta años del estreno de la película “Psycho” (“Psicosis”, 1960), de Alfred Hitchcock, su influencia en la cultura de masas sigue intacta. Se director se había ganado el mote de “maestre del suspense” con brillantes películas de misterio como “Rear Window”  (“La ventana indiscreta” 1954) y “North by Northwest” (“Intriga internacional”, 1959), pero “Psycho” fue algo totalmente diferente. Con sus estremecedores arrebatos de violencia y su provocativa sexualidad explícita, la película desafió los estrictos límites de la censura de ese momento así como los nervios de la audiencia, y se convirtió en el mayor éxito en la carrera de Alfred Hitchcock.David Thomson, autor del libro “The Moment of Psycho: How Alfred Hitchcock Taught America to Love Murder” ("El momento de Psicosis: Cómo Alfred Hitchcock enseñó a Estados Unidos a amar el asesinato", 2010) ha dicho que los 45 segundos  de la famosa escena del asesinato en la ducha todavía clasifican en el ranking de "las escenas más violentas jamás filmadas en el cine estadounidense". Según el libro “Story of the Scene” (“Historia de la escena”, 2009),  de Roger Clarke,  esta escena "cambió el cine para siempre".

El crimen en la ducha, posiblemente la escena más famosa en la historia del séptimo arte, marcó la irrupción de la violencia gráfica en el cine Durante los primeros 45 minutos de “Psycho”, la audiencia sigue a Marion Crane  (Janet Leigh) y construye un vínculo con ella, aparentemente el personaje principal de la película. Luego, en una brutal y eléctrica escena, mientras Marion pretende tomar una ducha en el tétrico Bates Motel, es asesinada a cuchilladas por quien parece ser una anciana."Ellos (la audiencia) jamás habían visto algo parecido: el asesinato de un personaje principal casi en la tercera parte de la trama provoca un auténtico shock y una sensación absoluta de desorientación", explica Michael Brooke, curador del Instituto del Cine Británico.

“Psycho” fue filmada en blanco y negro, algo inusual para Hitchcock en esa etapa de su carrera, en parte para reducir costos pero también para hacer la escena de la ducha un poco más digerible: que lo gráfico de esa escena fuera más digerible. "La escena de la ducha en colores en 1960 hubiera sido imposible de exhibir", dice Brooke.

El personaje más fascinante de “Psycho” es Norman Bates, el extraño joven resignado a dirigir el decadente hotel familiar y a cuidar de su abusiva e inválida madre, magistralmente protagonizado por Anthony Perkins. Luego del asesinato de Marion, la historia se mueve hacia el punto de vista de Bates y el público  es llevado a empatizar con él frente a su agónico dilema: tener que ocultar el horrendo crimen de su madre. "Hay una escena justo después del crimen de la ducha en la que el auto (de Marion Crane) se está hundiendo en el pantano pero se detiene por un momento, y uno casi desea -de una manera un poco extraña- que se siga hundiendo. Uno no quiere que él sea descubierto, aunque esté encubriendo un terrible asesinato", dice Brooke. El efecto fue hecho para jugar con los sentimientos de la audiencia de una forma en que las principales historias de suspenso jamás lo habían hecho. “Con toda la información que uno ha recibido, lo cree inocente y se identifica con su crisis", concluye Duncan. 

“Pyscho” es la primera película de la historia que nos lleva a sentir simpatía por el asesino. También es la primera que muestra sexualidad explícita: abre con un paisaje de Phoenix, Arizona, en un caluroso día de diciembre, con la cámara moviéndose a través de los techos de las casas antes de entrar casualmente por la ventana de un hotel donde -sin lugar a dudas- una Leigh en ropa interior y un John Gavin sin camiseta acaban de hacer el amor. Estos primeros minutos son casi una declaración de cuál es la intención del director. "Él estaba probando muy deliberadamente los límites de los censores", dice Brooke. "Tomó lo que hasta ese momento sólo habían sido sugestivas implicancias sexuales y las colocó en primer plano".

El uso de la música también fue toda una novedad en la película y sentó precedentes para las producciones posteriores:  los violines sonando durante el crimen en la ducha han alcanzado un estatus de símbolo, que denota violencia cruel e inminente."Fue sólo con la segunda versión, ya con música, que la gente saltó de sus asientos, especialmente cuando los chillidos de los violines empiezan", señala Brooke. La más memorable parte de esa banda de sonido, dirigida por Bernard Herrmann, ha sido tan imitada después que hoy se ha vuelto un cliche, según el experto.

Alfred Hitchcock, el genio responsable de "Psycho", nació en Londres el 13 de agosto de 1899, y murió el 29 de abril de 1980 en Los Ángeles, tras seis décadas de producción cinematográfica y más de 50 películas. Su carácter apocado y obsesivo lo hacía sentir especial predilección por los pájaros, las madres, las damas rubias y los fugitivos acusados injustamente diversos delitos, esto último debido a un episodio traumático de su infancia que le hizo desarrollar un miedo desmedido hacia la policía. Sabia lo que hacía y sabía lo que decía:

"Dales placer, el mismo que consiguen cuando despiertan de una pesadilla".

"Ver un asesinato por televisión puede ayudarnos a descargar los propios sentimientos de odio. Si no tienen sentimientos de odio, podrán obtenerse en el intervalo publicitario".

"La duración de una película debe ser proporcional a la resistencia de la vejiga humana".

"Estoy seguro que a cualquiera le gusta un buen crimen, siempre que no sea la víctima".

“La televisión ha vuelto a traer el asesinato a las casas, es decir, donde pertenece.”

“Imagínese a un hombre sentado en el sofá favorito de su casa. Debajo tiene una bomba a punto de estallar. Él lo ignora, pero el público lo sabe. Esto es el suspense.”

“Siempre haga que el público sufra tanto como sea posible.”

Para sufrir como el gran Alfred Hitchcock quería que sufriéramos, aquí va la sexta parte de mi lista de películas de terror y crímenes inspiradas en hechos reales.

“CHILD’S PLAY” (1988)

“Child's Play” (“Chucky: el muñeco diabólico”) es una película de terror estadounidense estrenada el 9 de noviembre de 1988. Escrita por Don Mancini y dirigida por Tom Holland, la película trata sobre un asesino en serie, llamado Charles Lee Ray que, a punto de morir, realiza un ritual vudú para transferir su alma a un muñeco, con la intención de vengarse de  quienes provocaron su muerte, e intentar luego poseer el cuerpo de Andy, un inocente niño de 6 años, dueño del juguete. La película generó varias secuelas: “Child's Play 2” (“Chucky: el muñeco diabólico 2”, John Lafia, 1990), “Child's Play 3” (“Chucky: el muñeco diabólico 3”, Jack Bender, 1991), “Bride of Chucky” (“La novia de Chucky”, Ronny Yu, 1998), “Seed of Chucky” (“El hijo de Chucky”, Don Mancini, 2004) y “Curse of Chucky” (“La maldición de Chucky”, Don Mancini, 2013). Se espera para este año el estreno de “Cult of Chucky” (“El culto de Chucky”), también dirigida por Don Mancini.

Don Mancini basó su guion en  la historia de un Robert, el muñeco, que perteneció al pintor y escritor Robert Eugene Otto, a quienes sus  padres llamaban cariñosamente Gene. Fue un regalo que recibió siendo niño, a principios del siglo XX, de parte de una criada africana que trabajaba para su familia. La criada, que se cree que practicaba magia negra, no estaba conforme con el trato que recibía de los Otto, y puso una maldición en el muñeco.

Poco tiempo después de haber recibido el muñeco, los padres oyeron al niño hablar con él. Los vecinos afirmaban que cuando la familia Otto salía de la casa, veían a Robert asomándose por las ventanas, como si hubiera comenzado a moverse por sí solo. Gene comenzó a experimentar atroces pesadillas y a jurar que el muñeco era capaz de cobrar vida. En una ocasión, mientras el niño dormía, se escuchó un estruendo en su habitación. Cuando sus padres fueron a verlo, encontraron la mayoría de los muebles tumbados y a Robert, el  muñeco, tirado al pie de la cama. Gene, llorando, afirmó: “No fui yo, fue Robert”.

Los padres de Gene confinaron al muñeco al desván de la casa. Allí permaneció muchos años. Después de la muerte de Robert Eugene Otto, a principios de los ‘70, una nueva familia se mudó al lugar y descubrió al muñeco, que pasó a pertenecer a una niña de unos 10 años, pero sus padres se deshicieron de él ante los reclamos de su hija, que juraba que Robert cobraba vida y la atacaba por la noche.

Actualmente, el muñeco se encuentra en el Museo Fort East Martello, en Key West. Todavía abraza su león de peluche y viste su traje blanco de marinero, y es una de las grandes atracciones del lugar. Algunos empleados del museo afirman que durante el mes de octubre el muñeco se vuelve más activo, y por las noches se pueden oír golpeteos contra el vidrio de la recámara transparente donde se encuentra. La leyenda afirma que los visitantes deben pedirle permiso a Robert para filmarlo o fotografiarlo, ya que de lo contrario se exponen a una posible maldición. Se dice que la gran cantidad de cartas y fotografías que pueden verse pegadas en las paredes del cuarto donde se encuentra Robert son notas de individuos que lo fotografiaron sin permiso y le ruegan levantar las maldiciones que lanzó sobre ellos.



“JACK THE RIPPER” (1988)

“Jack the Ripper” (“Jack el Destripador”) es una película filmada para la televisión inglesa en 1988 y dirigida por David Wickes.

Entre el 31 de agosto y el 9 de noviembre de 1888, la ciudad de Londres  entró en pánico: los asesinatos de cinco prostitutas en Whitechapel, una de las zonas más pobres de la capital británica, conmocionaron a la opinión pública debido a su manifiesta brutalidad, ya que incluían atroces mutilaciones, y pusieron de manifiesto la terrible pobreza y degradación de los barrios obreros. En medio de la histeria colectiva, Scotland Yard recibió una carta, presuntamente obra del asesino, en la que éste se identificó con el nombre con el que ha pasado a la historia: “Jack el Destripador”. En otra macabra misiva, dirigida a un comité ciudadano de vigilancia y acompañada por un pedazo de riñón (perteneciente, se supone, a una de sus víctimas, Catherine Edowes), Jack tuvo la amabilidad de proporcionar su dirección, aclarando que la carta era remitida desde el infierno. Tras el asesinato de Marie Kelly, su última víctima conocida, Jack el Destripador se desvaneció, y aún hoy perviven las especulaciones acerca de su verdadera identidad.

“THE SERPENT AND THE RAINBOW” (1988)

“The Serpent and the Rainbow” (“La serpiente y el arco iris”) es una película de suspenso estadounidense producida en el año 1988, dirigida por Wes Craven e interpretada por Bill Pullman. Relata la historia de un antropólogo de Harvard  enviado a Haití para investigar una extraña substancia relacionada con la magia negra y el vudú, que podría servir para salvar vidas humanas.

La película se basa parcialmente en el libro homónimo de Wade Davis, donde se refiere a sus experiencias en Haití y a su investigación acerca del notorio caso de Clairvius Narcisse. Según informes, Clairvius fue envenenado con una mezcla de diversas drogas naturales hasta caer en un estado de muerte aparente, suponiéndose que el instigador de este suceso fue su propio hermano, luego de una fuerte discusión por la venta de unas tierras, en abril de 1962. Luego de este pleito, comenzó a escupir sangre y sufrir de náuseas, hasta caer en un estado similar al de la muerte. Fue sepultado en mayo de 1962 y, al poco tiempo, su cuerpo fue exhumado. Se lo trató con un preparado derivado de la datura,  una planta que en determinadas dosis tiene efectos disociativos y alucinógenos y es causante de pérdida de memoria. De este modo se anuló su voluntad y quedó bajo las órdenes de un "amo", un Bokor (brujo)  que lo obligó, junto con muchos otros zombis esclavos, a trabajar en sus plantaciones de azúcar. El Bokor fue asesinado en 1964 y, luego de de que las dosis regulares del alucinógeno que recibía cesaron, Clairivius recuperó la cordura, a diferencia de muchas otras víctimas de la misma práctica que sufrieron daños cerebrales permanentes. El 18 de enero de 1980 fue encontrado vagando, semidesnudo y en un estado de shock, en las afueras de su pueblo natal. Clairvius falleció por segunda y definitiva vez en 1994. 

“JACK’S BACK” (1988)

“Jack's Back” (“El regreso de Jack”)  es un film de terror estadounidense dirigido por Rowdy Herrington, en 1988. La película, interpretada por James Spader, cuenta la historia de un joven doctor de Los Ángeles que es sospechoso de ser el responsable de una serie de crímenes cometidos por un copycat (imitador) de Jack el Destripador, que celebra el cumpleaños número cien del mítico personaje recreando sus crímenes.

Entre el 31 de agosto y el 9 de noviembre de 1888, la ciudad de Londres  entró en pánico: los asesinatos de cinco prostitutas en Whitechapel, una de las zonas más pobres de la capital británica, conmocionaron a la opinión pública debido a su manifiesta brutalidad, ya que incluían atroces mutilaciones, y a la forma en la que ponían de manifiesto la terrible pobreza y degradación de los barrios obreros. En medio de la histeria colectiva, Scotland Yard recibió una carta, presuntamente obra del asesino, en la que éste se identificó con el nombre con el que ha pasado a la historia: “Jack el Destripador”. En otra macabra misiva, dirigida a un comité ciudadano de vigilancia y acompañada por un pedazo de riñón (perteneciente, se supone, a una de sus víctimas, Catherine Edowes), Jack tuvo la amabilidad de proporcionar su dirección, aclarando que la carta era remitida desde el infierno. Tras el asesinato de Marie Kelly, su última víctima conocida, Jack el Destripador se desvaneció, y aún hoy perviven las especulaciones acerca de su verdadera identidad.

“BLIND FAITH” (1989)

“Blind Faith” (“Fe ciega”) es una película de 1989 dirigida por Dean Wilson. Está basada en los crímenes de Gary Heidnik, conocido como el sembrador de bebés.

Heidnik creó en 1971, en North Marchall Street, Filadelfia, la Iglesia Unida de los Ministros de Dios. Se casó luego con una mujer con retraso mental y llevó a la hermana de su esposa a vivir a su casa, donde convirtió a las mujeres en sus esclavas sexuales, por lo que pasó un tiempo en prisión.

En 1986, Heidnik sintió el deseo de crear una gran familia, tomando diez esposas y teniendo hijos con todas ellas. Se dedicó a raptar mujeres afro-americanas con retrasos mentales o prostitutas, a las que  encerraba en el sótano de su iglesia, donde eran sometidas a actos sexuales forzosos y a torturas físicas, algunas de las cuales fueron asesinadas.

El 24 de marzo de 1987, Josefina, una víctima de Heidnik que se había convertido en su ayudante, logra convencerlo de dejarla ir a ver a sus padres y acude a la policía y lo denuncia. El 25 de marzo de 1987, la policía allana la residencia su residencia y rescata a tres mujeres secuestradas.

Gary Heidnik fue condenado a muerte y ejecutado en Pensilvania el 6 de junio de 1999.

“DER HAMMERMÖRDER” (1990)

“Der Hammermörder” (“El asesino martillo”) es una película alemana de 1990 dirigida por Bernd Schadewald, protagonizada por Christian Redl  y basada en la novela homónima de Fred Breinersdorfer, quien también escribió el guion. La película aborda  la historia real del asesino en serie Norbert Poehlke, un oficial de policía alemán que cometió seis asesinatos y cuatro robos a bancos en los años 1984/1985 a nivel nacional. El 22 de octubre de 1985, cuando la policía estaba sobre él, asesinó a su esposa y a sus dos hijos pequeños (una tercera hija había muerto a causa de un tumor cerebral en 1984) y se suicidó.

 “COLD LIGHT OF DAY” (1989)

“Cold Light of Day” (“Fría luz del día”) es una película británica de 1989 dirigida por Fhiona-Louise. Está basada en la vida del asesino en serie Dennis Nilsen.

Dennis Nilsen, un reservado trabajador social de orientación homosexual, inició su carrera criminal en 1978 cuando conoció a un joven en un bar y lo invitó a su apartamento, donde mantuvieron relaciones sexuales. Cuando despertó a la mañana siguiente y vio al muchacho durmiendo a su lado, fue consciente de que, en poco tiempo, el chico se vestiría y se iría. Para evitarlo, tomó una corbata, lo estranguló y culminó su faena ahogándolo en la bañera. Luego llevó al  cadáver a su cama, donde practicó con él actos de necrofilia. Guardó el cadáver bajo las tablas de su habitación. Siete meses después, juntó los restos y los quemó en una fogata.

Nilsen asesinó del mismo modo a catorce hombres, estudiantes, indigentes o parejas suyas, y tiró sus restos por el desagüe.

Hacia mediados de 1984, los vecinos de Nilsen no aguantan el olor que salía de sus cañerías atascadas y  llamaron a un fontanero, que encontró carne humana putrefacta flotando en las tuberías del edificio. Enterada la policía del macabro descubrimiento, inició una larga investigación y llegó a la casa de Nilsen.  Un día en que Dennis Nilsen regresaba del trabajo, vio a tres hombres en su puerta. El astuto oficial de policía Peter Jay le espetó: “Muéstrenos los otros cuerpos, Nilsen”, a lo que el aludido sorprendentemente respondió: “Sí, pasen; están en el armario y en el baño”. Cuando le preguntaron cuántos hombres había matado, respondió: “15 o 16, no me acuerdo”. Fue arrestado de inmediato.

“DOCTEUR PETIOT” (1990)

“Docteur Petiot” es una película francesa de 1990 dirigida por Christian de Chalonge  e interpretada por Michel Serrault, basada en la vida del médico y asesino en serie Marcel Petiot, conocido como el Dr. Muerte.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Petiot trabajaba como médico en la Francia ocupada por los nazis, atendiendo en su consulta privada de París. Sin embargo, su actividad más lucrativa durante la Ocupación fue su ruta de escape falsa. Bajo el seudónimo Dr. Eugène, Petiot pretendía tener medios para hacer salir de Francia de forma segura a gente que era buscada por los alemanes o por el régimen de Vichy. Petiot aseguraba que podía arreglarles un viaje a Argentina. Una vez que las víctimas estaban a su disposición, les decía que el gobierno argentino solicitaba que todos aquellos que entraran a nuestro país debían ser inoculados contra diversas enfermedades y, con esta excusa, les inyectaba cianuro. Una vez muertos, se adueñaba de sus posesiones y disponía de los cuerpos. Al principio los arrojaba al Sena; más tarde, comenzó a destruirlos sumergiéndolos en cal viva o incinerándolos.

El 11 de marzo de 1944, la Policía acudió a casa del doctor Petiot, alertada por los atemorizados vecinos que observaban salir de la chimenea una grasienta humareda negra y un hedor insoportable. Allí descubrieron huesos humanos en la chimenea, pero Petiot mintió a la policía diciendo que era miembro de la Resistencia y que los huesos pertenecían a soldados nazis.  Cuando se constató que aquellas muertes no tenían que ver con la ejecución de colaboradores nazis, Petiot ya había huido en su bicicleta. Se registró minuciosamente la casa y se encontraron casi 150 kilos de tejido corporal humano calcinado y varios cuerpos descomponiéndose en un pozo del garaje que contenía cal viva.

Marcel Petiot fue detenido el 2 de noviembre de 1944 y el 4 de abril de 1946 el fue condenado a la guillotina.

“THE SILENCE OF THE LAMBS” (1991)

"The Silence of the Lambs" ("El silencio de los inocentes") es una película estadounidense de 1991 de género thriller, que combina tintes de crimen y terror. Fue dirigida por Jonathan Demme y protagonizada por Anthony Hopkins y Jodie Foster. El papel del asesino Buffalo Bill estuvo a cargo de Ted Levine. La película está basada en la novela homónima de Thomas Harris, escrita en 1988 como secuela de "El dragón rojo" (1981), que gira en torno de Hannibal Lecter, un brillante psiquiatra y a la vez asesino en serie y caníbal. El filme cuenta la historia de Clarice Starling, una joven detective en formación del FBI, que busca la ayuda del Doctor Lecter con el objetivo de aprisionar a otro asesino en serie conocido como Buffalo Bill.

El personaje de Buffalo Bill, al igual que el de Norman Bates, de “Psycho”, y el de Leatherface, de “The Texas Chainsaw Massacre”, está inspirado en Ed Gein, un asesino en serie de Wisconsin que  cometió sus crímenes durante la década del ’50. Cuando se descubrieron sus asesinatos se encontraron en su casa una serie de objetos realizados con piel y huesos humanos. Se halló, también, un vestuario completo fabricado con piel humana, que incluía pantalones, un torso con pechos y varias máscaras, como los que Buffalo Bill pretende confeccionar con la piel de sus víctimas.   Este personaje siniestro también tiene rasgos de otros asesinos famosos: Ted Bundy , que fingía estar herido para atrapar a sus víctimas y Gary Heidnik, que secuestraba a sus víctimas y las arrojaba en un pozo.



"NAKED LUNCH" (1991)

“Naked Lunch” (“El almuerzo desnudo”)  es una película canadiense de 1991 escrita y dirigida por David Cronenberg y basada en la novela homónima de William S. Burroughs. Está protagonizada por Peter Weller, Judy Davis, Ian Holm, Julian Sands y Roy Scheider.

Una de las muchas libertades que se toma Cronenberg con la adaptación de “Naked lunch” es incluir a personas y episodios de la vida de Burroughs, en un intento por capturar su esencia, su forma de pensar y su escritura. Los dos amigos de Bill, el protagonista de la historia, son alter egos de Jack Kerouac y Allen Ginsberg, otros reconocidos autores de la generación beat, y su esposa, el de Joan Vollmer, la segunda mujer de Burroughs, fallecida en un extraño incidente en México que Cronenberg recrea en la película en dos ocasiones. El 6 de septiembre de 1951, Burroughs y Vollmer se encontraban en la ciudad de México, bebiendo en un departamento en la planta superior del Bounty Bar, propiedad de un estadounidense. William jugaba con una manzana y le propuso a Joan recrear la hazaña de Guilllermo Tell. Ella aceptó y colocó la manzana en su cabeza. Burroughs apuntó a la manzana con un Colt, erró el disparo y la mató.

Burroughs pasó trece días en la cárcel hasta que su hermano llegó a la ciudad de México y sobornó a los abogados y funcionarios mexicanos para liberarlo bajo fianza, mientras esperaba el juicio por el asesinato, que fue caratulado homicidio culposo.  Un tiempo después regresó a EE. UU. Fue condenado en ausencia por homicidio y sentenciado a dos años de prisión, que jamás cumplió. William S. Burroughs dijo más tarde que matar a Vollmer fue un acontecimiento crucial en su vida,  que lo empujó a escribir.

Hasta aquí, mis amables lectores, todo lo que tenía para ofrecerles por hoy. Me despido de ustedes con un pensamiento del maravilloso cineasta David Cronemberg:  “La muerte es la base de todo horror”.

Buenas noches.