PELÍCULAS DE TERROR Y CRÍMENES INSPIRADAS EN HECHOS REALES XIV

PELÍCULAS DE TERROR Y CRÍMENES INSPIRADAS EN HECHOS REALES XIV

"Tuve que matarla porque me iba a delatar. Tú no me vas a delatar, ¿verdad?"

“Orphan” (“La huérfana”, 2009) 

La realidad supera a la ficción. Parece una frase hecha, pero no lo es. Ninguna película a podido superar aún el horror que llevaron a la vida de sus semejantes estos asesinos famosos que, además de matar hablaron. Sus palabras, sin dudas, ponen los pelos de punta.

H. H. Holmes:

“Sí, nací con el diablo adentro (…) y ha estado conmigo siempre”.

Edmund Kemper, el asesino de las colegialas:

"Cuando veo a una mujer bonita en la calle, una parte de mí, dice, ‘que chica tan atractiva, me gustaría hablar con ella, salir con ella’, pero otra parte de mí se pregunta cómo se vería su cabeza pinchada en un palo."

"Me preguntaba que se sentiría al disparar sobre una abuela."

"Cuando las mato sé que me pertenecen, es la única manera de poseerlas. Las amo y las deseo."

Cuando le preguntaron si volvería a matar en caso de recuperar la libertad: “¡Por supuesto! Míreme, si usted es tan idiota como para entrar a un auto conmigo, merece morir.”  

Kenneth Bianchi, el estrangulador de la colina:

"Aquí estoy pidiendo perdón. No obstante, sé que iré al infierno." 

Richard Ramírez, el merodeador nocturno:

“Me encanta asesinar personas. Adoro verlas morir. Les disparo en la cabeza y se sacuden y retuercen por todo el lugar para después simplemente detenerse. Las corto con un cuchillo y veo sus rostros volverse muy pálidos. Amo toda aquella sangre. Le hablé a mi mujer para que me entregara todo su dinero. Ella dijo que ‘no’, entonces la corté y le arranqué los ojos.”

"No me entienden. Tal y como suponía, no son capaces de hacerlo. Yo estoy más allá de su experiencia. Estoy mas allá del bien y del mal..." 

“Todos tenemos en las manos el poder de matar, pero la mayoría de las personas tiene miedo de usarlo."

Al ser sentenciado: "¡Te veo en Disneylandia!" 

"¡Legiones de la noche!, ¡Razas de la noche! No repitan los errores del merodeador nocturno y no concedan clemencia alguna... Yo seré vengado. Lucifer está con nosotros."

Henry Lee Lucas:

“Le quité el sujetador y las bragas y tuve sexo con ella. Creo que esta es una de las cosas que forman parte de mi vida… tener relaciones sexuales con los muertos.” 

Andréi Chikatilo, el carnicero de Rostov:

Al ser detenido: "¿Cómo pueden hacerle esto a una persona de mi edad?"

"En los actos sexuales perversos experimentaba una especie de furor, una sensación de no tener freno. No podía controlar mis actos. Desde mi niñez me he sentido insuficiente como hombre y como persona. Lo que hice no fue por placer sexual, sino porque me proporcionaba cierta paz mental y de alma por largos periodos. Sobre todo después de contemplar todo tipo de películas sexuales. Lo que hice, lo hice después de ver videos de actos sexuales perversos, crueldades y horrores."

En  el juzgado, donde se bajó los pantalones y meneó su pene: "Fíjense qué inutilidad, ¿Qué piensan que iba a hacer con esto?"

Antes de ser ejecutado: “¡No me vuelen el cerebro! Los japoneses lo quieren comprar.” 

Ted Bundy: 

“Me gustaba matar, me quería matar.”

“Quiero dominar la vida y la muerte.”

“Yo soy el desgraciado con más sangre fría que jamás hayan conocido.”

“Aprender lo necesario para matar y hacerse cargo de los detalles, es como cambiar una llanta… La primera vez tienes cuidado, pero a la vez 30, no puedes recordar donde dejaste la llave de las tuercas.”

“A veces me siento como un vampiro.”

“La fantasía que acompaña y genera la expectativa que precede al crimen, siempre es más estimulante que el período inmediatamente posterior al crimen en sí mismo.”

“Todos nos volvemos un poco locos a veces.”

"Nosotros los asesinos seriales somos sus hijos, somos sus esposos, estamos en todas partes. Y habrá más de sus niños muertos mañana."

"Toda la rabia que he estado desahogando con las mujeres que maté, estaba dirigida contra mi madre."

“Cuando trabajas duro para hacer algo bien, luego no quieres olvidarlo.”

"¿Qué es uno menos? ¿Qué significa una persona menos en la faz del planeta?"

“Sientes el último suspiro abandonando sus cuerpos. Las ves a los ojos. Una persona en esta situación es Dios.” 

Alexander Pichushkin, el asesino del ajedrez:

"Una vida sin homicidios es para mí como una vida sin alimentos para ustedes."

"Salvaron la vida de muchas personas al atraparme, nunca me hubiera detenido."

Leonard Lake:

“Si amas a alguien, déjalo ir. Si no regresa, cázale y mátale.”

“Dios destinó a las mujeres a la cocina, a la limpieza de la casa y al sexo. Cuando no están siendo usadas, deben convertirse en presas.” 

Dr. Michael Swango:

“Me encanta el olor dulce, grosero y espeso del homicidio en un lugar cerrado. Es la única forma que tengo de recordar que aún estoy vivo.” 

Carl Panzram:

"Yo reformo a las personas que tratan de reformarme y la manera de hacerlo, es matándolas."

“Mi lema es: róbalos a todos, viólalos a todos, mátalos a todos.”

“Estaba tan lleno de odio que no había lugar dentro de mí para sentimientos como el amor, la pena, la ternura, el honor o la decencia, de lo único de lo que me lamento es de no haber nacido muerto o simplemente no nacer.”

"Desearía que la humanidad tuviera un cuello para poder ahorcarla."

Antes de ser ejecutado: "Volveré, no como soy, sino como seré".

A su verdugo: "¡Apúrate, bastardo! Yo en tu lugar ya hubiese matado a diez."

Jeffrey Dahmer, el carnicero de Milwaukee:

A sus guardias en prisión: “Muerdo.”

"Ya no deseaba seguir matando para quedarme solo con su cadáver."

“No pude encontrarle ningún sentido a mi vida mientras estuve allá afuera, tengo la certeza absoluta de que tampoco lo encontré aquí (en la Winsconsin Columbia Correctional Institution). Este es el gran final de una vida miserablemente vivida, y el resultado final es abrumadoramente deprimente… no es más que una historia de vida triste, patética, despreciable, infeliz, eso es todo lo que ella es. Cómo eso puede ser de ayuda para alguien, no lo sé.”

Gary Ridgway, el asesino de Green River:

“Elegí a las prostitutas por qué pensé que podría matar a cuantas quisiera sin ser descubierto. También las elegí como víctimas por qué era fácil atraparlas pasando desapercibido.”

 “Me gustaba conducir por los caminos de todo el país y pensar en las mujeres que deposité allí. Maté a tantas mujeres que no puedo precisar cuántas.”

“No creo en el hombre, en Dios, ni en el Diablo. Odio a toda la raza humana, incluyendo a mí mismo.”

Peter Kürten, el vampiro de Düsseldorf:

"Yo necesito  sangre igual que otros necesitan de alcohol."

A su verdugo: "¿Después de que mi cabeza se haya desprendido del cuerpo, podré oír, por lo menos por un momento, el sonido de mi propia sangre cuando brote de mi cuello? Sería el mayor placer para terminar todos mis placeres."

John Wayne Gacy, el payaso asesino:

"No se puede ser un personaje que lleva una vida secreta con éxito, si no se manipula a veces."

“La única cosa por la que me pueden condenar es manejar una funeraria sin permisos necesarios”

Antes de ser ejecutado:  “¡El Estado me está asesinando! ¡Bésenme el culo! ¡Nunca sabrán dónde están los otros!”

Aquí está la decimocuarta parte de esta truculenta lista de películas de terror y crímenes inspiradas en hechos reales. Pasen y lean.

“CHUGYEPKJA” (2008)

“Chugyeokja” (“El  perseguidor”) es una película surcoreana del año 2008 protagonizada por Kim Yoon-seok y Ha Jung-woo.  Fue dirigida por Na Hong-jin  y está inspirada en el asesino en serie coreano Yoo Young-chul.

Yoo Young-chul creció en medio de la pobreza y se convirtió en una persona resentida y frustrada. Comenzó a robar en 1993 y a partir de allí,  fue encarcelado en varias ocasiones por diferentes delitos. En marzo del año 2000 violó a una adolescente de 15 años. Fue encarcelado nuevamente y su esposa lo abandonó.

Mientras Yoo estaba en prisión, su amargura y su resentimiento se hicieron más y más grandes. Se interesó en la vida de Jeong Du-Young, un asesino surcoreano que entre junio de 1999 y abril del 2000 acabó con la vida de nueve personas adineradas, reafirmando su idea de que los ricos eran culpables de la miseria de los pobres y debían pagar por eso con su sangre. Al salir de prisión, en el año 2003, comenzó a matar perros callejeros, un brutal entrenamiento para  pasar luego a las víctimas humanas.

El 24 de septiembre del 2003, Yoo inició su campaña contra los ricos matando a martillazos en la cabeza al profesor Lee, de 72 años, y a su esposa, de 68. Volvió a matar en octubre y en noviembre. El modus operandi era siempre el mismo: iba a un barrio adinerado, buscaba una casa de aspecto opulento, evaluaba sus riesgos desde afuera, saltaba el muro, entraba, asesinaba a martillazos en la cabeza a todos los que estaban en la casa, borraba sus huellas y abandonaba el lugar.

Tras el crimen del 18 de noviembre, Yoo dejó de asesinar por cierto tiempo en el cual, con una identificación falsa de policía, se dedicó a extorsionar a proxenetas y a prostitutas. Con el dinero de sus extorsiones, consiguió un departamento al que solía llevar prostitutas. En diciembre inició una relación sentimental con una de ellas,  que rechazó su oferta de matrimonio tras saber de sus crímenes. Aquello hizo que Yoo llegara a odiar más a las prostitutas que a los ricos, por lo que en el 2004, se convirtieron en sus nuevos blancos. Entre abril y julio del 2004, asesinó a diez prostitutas a martillazos en su apartamento de Mapo, Seúl.

Yoo fue capturado el 16 de julio. En la estación de Policía confesó sus atroces crímenes. Fue juzgado y condenado a la pena capital.

“BUNDY: AN AMERICAN ICON” (2008)

“Bundy: An American Icon” (“Bundy: Un icono americano”) es una película de horror de 2008 que describe la carrera criminal del asesino en serie estadounidense Ted Bundy. Fue dirigida por Michael Feifer  y protagonizada por Corin Nemec.

Bundy nació en 1946, hijo de una joven soltera proveniente de una familia puritana. Fue rechazado por ser hijo ilegítimo y, durante sus primeros años, se crió como hijo de sus abuelos. Se convirtió  en un adolescente tímido, con tendencia a la soledad, que gustaba maltratar y mutilar animales.

Fue un estudiante aplicado y con buenas notas en la Universidad de Washington y en la Universidad de Puget Sound (Tacoma), donde cursó estudios de derecho y psicología. Durante la primavera de 1967 se enamoró de Stephanie Brooks, una hermosa e inteligente joven de familia acomodada. Stephanie fue el sueño hecho realidad de Bundy, pero dos años después ella se graduó en Psicología y finalizó la relación por considerar que su pareja carecía de objetivos claros en la vida. Bundy nunca superó la ruptura y se obsesionó con Stephanie. Se reencontraron en 1973 y mantuvieron una corta relación a la que Bundy puso punto final. Poco después, iniciaría su carrera delictiva. .

El primero de sus crímenes tuvo lugar en Washington, en 1974, cuando atacó a una mujer mientras dormía golpeándola con una barra de hierro. Apenas un mes más tarde asesinó a una joven en el mismo campus universitario, llevándose el cuerpo consigo, pero dejando la habitación llena de sangre.

Favorecido por su atractivo físico y su carismática personalidad, Ted Bundy se paseaba por los supermercados pidiendo ayuda a mujeres jóvenes para conducir su coche Wolkswagen, fingiendo que tenía un brazo roto, sin despertar en ellas ninguna sospecha. Las secuestraba, las violaba, las golpeaba hasta matarlas y volvía a violarlas. Fue arrestado por primera vez el 16 de agosto de 1974 en Utah,  tras ser identificado por una mujer que había intentado secuestrar meses antes, pero logró fugarse y continuar con sus aberrantes crímenes. La última víctima de Ted Bundy fue Kimberly Leach, de 12 años, que fue secuestrada el 9 de febrero de 1978 en Lake City. 

Ted Bundy fue recapturado, juzgado,  condenado a muerte y ejecutado en la silla eléctrica el 24 de enero de 1989. Los analistas estiman que el número de sus víctimas podría rondar las 100 mujeres, muy lejos de las cifras oficiales de alrededor de 36. 

“KEMPER” (2008)

“Kemper” es una película de 2008 dirigida por Rick Bitzelberger basada en la historia real del asesino en serie Ed Kemper, activo durante la década del ’70.

Edmund Kemper,  conocido también como El asesino de las colegialas (Co-ed killer) fue un niño extraño. Torturaba y asesinaba a animales, representaba rituales sexuales con las muñecas de sus hermanas y llegó a decir que, para besar a una maestra por la que se sentía atraído, tendría que matarla primero. Su madre -de la cual se sospecha que era borderline- lo obligaba a dormir en el sótano por miedo de que su hijo abusara de sus hermanas.

El 27 de agosto de 1964, a los 15 años, Kemper asesinó a sus abuelos, con los que vivía.  Fue internado en el Hospital Estatal de Atascadero y, además de hacerse amigo de su psicólogo, se convirtió en su asistente. Gracias a su inteligencia (poseía un cociente intelectual de 136) se ganó tal confianza del doctor que se le permitió el acceso a las pruebas aplicadas a otros internos. Gracias al aprendizaje que obtuvo de estas pruebas impresionó a su médico y consiguió el alta. Una vez libre, se fue a vivir con su madre a Santa Cruz, California.

Entre mayo de 1972 y febrero de 1973, Kemper asesinó a varias estudiantes que encontraba en la autopista. Las llevaba a zonas rurales aisladas para matarlas (con armas blancas, armas de fuego o acuchillándolas) y trasladaba posteriormente los cadáveres a su apartamento, donde practicaba actos de necrofilia. Usualmente, arrojaba los cuerpos desmembrados a barrancos o los sepultaba en campos.

En abril de 1973, Kemper mató a su madre mientras dormía golpeándola con un martillo de zapatero. La decapitó, la violó y arrojó sus cuerdas vocales al triturador de la cocina. En su declaración, dijo que "eso parecía apropiado, tanto como ella me maldijo, gritó y chilló por muchos años". Finalmente comió parte de sus órganos y durmió cuatro noches con el cuerpo en estado de putrefacción. Invitó luego a su casa a una de las mejores amigas de su madre - ajena a lo que había ocurrido - y la estranguló. Se dirigió con el coche hacia el este, sin escuchar en la radio ninguna noticia sobre sus asesinatos. Desilusionado, frenó y llamó a la policía para confesar que él era el asesino de las colegialas. Actualmente cumple cadena perpetua en la Prisión Estatal de Vacaville.

“THE HAUNTING IN CONNECTICUT” (2009)

“The haunting in Connecticut” (“Exorcismo en  Connecticut”) es una película de terror dirigida por Peter Cornwell en 2009. La trama sigue a los Campbell cuando se mudan a una casa (una antigua funeraria) para estar cerca del hospital donde se trata  su hijo con cáncer, Matthew. La familia pronto empieza a ser abrumada por acontecimientos violentos y traumáticos de fuerzas sobrenaturales que ocupan la casa. La película tuvo una secuela, "The Haunting in Connecticut 2: Ghosts of Georgia” (“Exorcismo en Georgia”, Tom Elkins, 2013).

La película se basa en hechos  que tuvieron lugar en el 208 de Meriden Avenue, Southington, en el estado norteamericano de Connecticut, en 1986. La familia Snedeker, conformada por el matrimonio de Carmen y Allen,  sus tres hijos y una sobrina, alquiló una casa  con el fin de vivir más cerca del hospital en el que Phillip, el hijo varón mayor, estaba recibiendo tratamiento por el cáncer que padecía. La nueva casa había sido, antiguamente, una funeraria y, al limpiarla, descubrieron utensilios para embalsamar y enseres de carácter fúnebre.

Los sucesos inexplicables comenzaron al  poco tiempo de la mudanza:  ruidos extraños, olores nauseabundos y apariciones de rostros feroces en  todas las habitaciones  de la casa, que, incluso, llegaron a atacar a los miembros de la familia. El carácter del hijo enfermo cambió rotundamente e intentó agredir sexualmente a su prima.

Los Snedeker se pusieron en contacto con  los parapsicólogos Ed y Lorraine Warren,  que corroboraron la veracidad de los sucesos relatados por el matrimonio  y llegaron a la conclusión de que la casa estaba habitada por demonios, ya que allí se habían llevado a cabo actos de nigromancia y necrofilia. Hasta 1989 y tras varios ritos de purificación, los Warren no consideraron limpia la casa, si bien por entonces los Snedeker ya habían abandonado el lugar.

En 1992, el escritor especializado en terror Ray Garton novelizó la historia tras una meticulosa serie de entrevistas con los Snedeker y los Warren, el betseller "In a Dark Place: The Story of a True Haunting".

La controversia llegó porque entre lo narrado por cada uno de los miembros de la familia perjudicada se detectaron contradicciones. Ray Garton afirmó  que, en privado,  los Warren llegaron a admitir que los Snedeker estaban locos  pero que lo más conveniente era rellenar los agujeros de la historia.

“THE FOURTH KIND” (2009)

“The fourth kind”  (“Contactos de cuarto tipo”) es una película del año 2009, dirigida por Olatunde Osunsanmi y protagonizada por Milla Jovovich, Charlotte Milchard, Elias Koteas, Will Patton, y Mia McKenna Bruce. El filme se ubica en Nome, Alaska, y trata el tema de las abducciones alienígenas. Su título proviene de la clasificación de encuentros cercanos con extraterrestres ideada por el ufólogo J. Allen Hynek, en la que el cuarto tipo es la abducción.

La película presenta  imágenes de archivo y estudio de casos reales, mezclando ficción y documental. Se vale de supuestos testimonios, noticias y publicaciones para reforzar la teoría de que las misteriosas desapariciones de varias personas en la zona se relacionan con el fenómeno extraterrestre. Ha tenido muchísimos detractores, pero lo cierto es que Nome, un número desproporcionado de personas desaparece cada año y, a pesar de las incontables investigaciones del FBI en dicha región, la mayor parte de los hechos no ha podido esclarecerse.

“IN HER SKIN (I AM YOU)” (2009)

“In Her Skin (I Am You)” es una película australiana escrita y dirigida por Simone Norte en el año 2009. Se basa en la historia real del brutal asesinato de Rachel Barber, de 15 años de edad, a manos de una ex niñera y vecina, Caroline Reed Robertson.

Rachel Barber era una hermosa adolescente y una talentosa bailarina con un futuro brillante. Desafortunadamente, su belleza y talento la hicieron blanco de una mujer trastornada que quiso apoderarse de su vida.

Caroline Reed Robertson tenía 19 años y, en ocasiones, había sido niñera de Rachel y sus hermanas menores. Físicamente poco agraciada, tenía una imagen muy negativa de sí misma. 

Caroline vio en Rachel todo lo que ella no era y aspiraba ser, y comenzó  a obsesionarse con la chica. Creía que el hecho de ser hermosa hacía a  Rachel automáticamente feliz, lo que tanto deseaba para sí misma. A lo largo del tiempo, la obsesión con la adolescente  fue creciendo en intensidad.  En 1997, Caroline tomó fotos de Rachel, supuestamente para proyectos escolares.

En los meses previos al asesinato, Caroline decidió que necesitaba una nueva identidad. Habló con la hermana menor de Rachel para averiguar la fecha de nacimiento de la chica, que, según la policía,  utilizó para obtener una copia de su certificado de nacimiento. Planeó matar y desfigurar a Rachel y crear una nueva identidad para sí misma como Jem Southall, un  joven de 16 años  con una personalidad  salvaje, diametralmente opuesta a la suya. En su mente trastornada, Jen podría nacer sólo si Rachel moría.

Caroline llevó a Rachel a su departamento con engaños y, en  algún momento de la noche del 1 de marzo de 1999, la estranguló con un cable telefónico. Mantuvo su cuerpo en su apartamento durante un par de días antes de enterrarlo en una granja en Kilmore, en las afueras de Melbourne, propiedad de su padre.

El 12 de marzo, después de atar algunos cabos sueltos, la policía allanó el departamento de Caroline y  la encontró inconsciente, al lado de una botella vacía de Tegretol. Hallaron, también, ropa del talle de Rachel. Después de ser  hospitalizada, Caroline Reed Robertson terminó confesando el asesinato de Rachel Barber.

“LESLIE, MY NAME ES EVIL” (2009)

“Leslie, my name is evil” es una película canadiense de 2010 dirigida por Reginald Harkena, que plantea, por un lado, una biografía de Leslie van Houten, una de las integrantes de la famila de Charles Manson y, por otro, hace una observación sobre la sociedad estadounidense en los años ‘60. Kirsten Hagen interpreta a Leslie van Houten.

Leslie Louise Van Houten fue una miembro de la familia Manson. Actualmente se encuentra en prisión, condenada por los asesinatos de Leno y Rosemary LaBianca.

Procedente de una familia de clase media del sur de California, Leslie van Houten, nacida el  23 de agosto de 1949, era una joven sociable y atlética que en el instituto llegó a ser elegida reina de uno de los bailes típicos de las escuelas de secundaria de EE.UU. Sin embargo, poco a poco se fue introduciendo en un mundo más sórdido. El divorcio de sus padres la afectó fuertemente, al igual que el aborto que se practicó obligada por su madre en plena adolescencia. Según el abogado de van Houten, el feto fue enterrado en el patio trasero de la casa familiar.

En el verano de 1968, Leslie, que ya consumía drogas,  conoció a Bobby Beausoleil y Catherine "Gypsy" Share y empezó a viajar con ellos. Share le habló de un hombre llamado Charles Manson, a quien describió como un ser parecido a Cristo, con respuestas para todas las preguntas. Meses después, Van Houten y sus amigos estaban viviendo con Manson en el rancho Spahn en las afueras de Los Ángeles.

Van Houten no participó en los crímenes de Sharon Tate y sus invitados, ocurridos en la noche del 8 al 9 de agosto de 1969 pero, 24 hs. después, asaltó junto a Charles "Tex" Watson y Patricia Krenwinkel la casa del matrimonio formado por Leno y Rosemary LaBianca, de 44 y 39 años respectivamente. Van Houten fue testigo de cómo Watson mató a Leno LaBianca y posteriormente fue responsable de infligir 16 de las más de 40 puñaladas que recibió su esposa, Rosemary. 

“DRIFTER: HENRY LEE LUCAS” (2009)

“Drifter: Henry Lee Lucas” es una película dirigida por Michael Feifer en el año 2009. Narra la historia del asesino en serie Henry Lee Lucas.

Henry Lee Lucas creció en el seno de una familia violenta y desestructurada, donde eran comunes los abusos, la crueldad y las humillaciones. Fue un hijo no deseado al que su madre golpeaba asiduamente y vestía como una niña, obligándolo a presenciar sus quehaceres como prostituta. Su padre, alcohólico y lisiado, también era castigado por la mujer.

Las experiencias sexuales de Henry, alrededor de los 13 años, estuvieron vinculadas a la zoofilia. Siempre relacionó el sexo con la muerte.

En 1950, su padre falleció en extrañas circunstancias. Luego de su muerte, Henry abandonó definitivamente su casa e inició su carrera delictiva con pequeños robos, ingresando pronto a reformatorios y, finalmente, a la cárcel. Salió en libertad por poco tiempo en 1959 y volvió a su casa donde, tras una fuerte discusión con su madre, la degolló con una navaja.

Ingresó a prisión y pasó luego cinco años en un hospital psiquiátrico,  donde fue catalogado como un psicópata suicida, sádico y con desviaciones sexuales. Sin estar rehabilitado fue puesto en libertad en 1970.  En 1977 se casó con la amiga de una hermana, madre de dos hijas (Cindy, de 8 años, y Kathy, de 9). Mientras su mujer salía a trabajar, Henry se quedaba en casa todo el día abusando de las niñas. Aprovechó al máximo esta situación, pero acabó aburriéndose de la rutina sexual, por lo que finalmente se fue sin dar ninguna explicación. Empezó a vagar con su coche por Estados Unidos y en Miami encontró al que iba a ser su inseparable amigo y amante, Ottis Toole, pirómano, asesino, caníbal y ligeramente retrasado. La Autopista I-35, que cruzaba todo el país, se convirtió en su particular coto de caza privado. Juntos violaron y asesinaron a decenas de mujeres, con cuyos cadáveres llevaron a cabo actos de necrofilia.

A principios de los años ’80 se integró al grupo Becky Powell, de 15 años, sobrina de Ottis, quien los secundó en sus crímenes y se convirtió en la novia oficial de Henry, lo que quebró su relación con Toole. Durante un tiempo, la pareja trabajó cuidando a una anciana, Kate Rich, y luego vivió un tiempo en una granja de predicadores denominada House of Prayer. Henry asesinó a Becky durante una discusión, y luego fue por Kate Rich. Poco tiempo después fue arrestado. Confesó los asesinatos de Becky y Kate Rich, y docenas de asesinatos más de los que ni siquiera era sospechoso. Ottis también fue arrestado por pirómano, y confesó haber acompañado a Henry en muchas de sus matanzas. Ottis fue condenado a cadena perpetua y Henry, a pena de muerte. La sentencia estaba fijada para 1988, pero fue aplazada a última hora.

El 13 de marzo de 2001, Henry Lee Lucas murió en su celda a causa de un paro cardíaco.

“NORMAL” (2009)

“Normal” es una película checa del año 2009, dirigida por Julius Ševčík, basada en el relato ficticio de Anthony Neilson  “Normal: The Düsseldorf Ripper”, sobre la vida de Peter Kürten, contada desde el punto de vista de su abogado. Cuenta con el actor Milan Kňažko  en el papel de Peter Kürten.

Desde muy pequeño, Peter Kürten mostró tendencias homicidas. Asesinó por primera vez  a los 9 años, cuando ahogó a dos amigos mientras se bañaban en el Rin.  Mientras crecía,  fue intercalando pequeños actos de delincuencia con breves pasos por la cárcel para pagar sus fechorías. Se dedicó también a torturar, violar y matar perros abandonados. 

1929 fue su año más sangriento. El 13 de febrero asesinó a una niña de 8 años. El 29 de agosto mató a una niña de 5 años y envió a un periódico local el mapa de la tumba de la criatura. En septiembre eliminó a una mujer con un martillo. El 7 de noviembre mató a dos hermanas de 5 y 14 años.  En 1930 cometió el error de dejar a una de sus víctimas con vida, Maria Budlick, quien, luego del ataque, acudió a la policía y posibilitó la confección de un retrato hablado del homicida. Acorralado, Kürten le confesó sus crímenes a su esposa y le ofreció la posibilidad de delatarlo, para que la mujer pudiera cobrar la suculenta recompensa que se ofrecía por su cabeza.

El 24 de mayo  de 1930, el vampiro de Düsseldorf fue localizado y arrestado. Fue condenado a muerte y ejecutado en Colonia el 2 de julio de 1931. Sus últimas palabras, dirigidas a su verdugo, fueron: "Dígame, cuando me hayan decapitado ¿podré oír siquiera un momento el ruido de mi propia sangre saliendo del cuello?" Tras su ejecución, su cabeza fue diseccionada y momificada, y en la actualidad se conserva en el museo Ripley's Believe It or Not!  de Wisconsin Dells en Wisconsin Dells, en los Estados Unidos.

"ORPHAN" (2009)

“Orphan” (“La huérfana”) es una película estadounidense dirigida por Jaume Collet-Serra   en el año 2009 que cuenta con las actuaciones de Vera Farmiga, Peter Sarsgaard e Isabelle Fuhrman. Narra la historia de una pareja que adopta a una niña de 9 años que esconde un oscuro secreto detrás de su dulce apariencia. La historia se inspiró en Barbora Skrlová, una  mujer oriunda de República Checa que sufre una extraña enfermedad glandular, hipopituitarismo, que, a pesar de ser adulta, la hace verse como una niña de 12 años.  Posee, además, unos evidentes rasgos psicopáticos que la llevaron a utilizar la enfermedad a su favor. Gran parte de su vida adulta se hizo pasar por una niña. Estuvo internada en un hospital psiquiátrico del que escapó, y, en el año 2007, se vio involucrada, junto a las hermanas Klara y Katerina Mauerová, en un sórdido caso de abuso infantil y asesinato. 

Los dos hijos de Klara, encerrados en una jaula en el sótano de la casa que compartían las tres mujeres, eran vigilados mediante un monitor utilizado para escuchar a los bebés, pero sus vecinos instalaron el mismo sistema para oír a su hijo, y fue eso lo que provocó que la verdad saliera a la luz. Las señales emitidas por  los aparatos se superpusieron y los vecinos supieron de las torturas a las que los pequeños eran sometidos. Inmediatamente llamaron a la policía, que, al llegar al lugar, encontró a Ondrej, de 7 años, y su hermano Jakub, de 9, desnudos y con graves lesiones (sobre todo en las extremidades, donde parecían haberles arrancado varios pedazos de carne), tirados sobre su propio excremento, y a una niña gritando por ayuda. La niña era Barbora, quien dijo llamarse Anicka y haber sido adoptada por Klara. Los dos niños y la niña fueron trasladados al hospital, donde uno de ellos falleció producto del maltrato.  Barbora se las ingenió para escapar y desapareció.

Pasó un año, y la policía checa no tenía noticias del paradero de Barbora, hasta que fue detenida en Noruega. Había sido adoptada por una pareja, pero ya no se estaba haciendo pasar por Anicka sino por Adam, un niño de 14 años.

Hasta aquí, amables lectores, la decimocuarta parte de esta macabra lista de películas de terror y crímenes inspiradas en hechos reales. Después de tantas citas de psicokillers y depravados, me despido de ustedes con el pensamiento de un imprescindible, el maravilloso Edgard Allan Poe, escritor, poeta, crítico y periodista romántico estadounidense, mundialmente conocido por ser un estandarte de la novela gótica y, sobre todo, por sus fascinantes cuentos de terror: “El demonio del mal es uno de los instintos primeros del corazón humano”.

Buenas noches.