HOLLYWOOD PARANORMAL: JEAN HARLOW
“Gusto a los hombres porque no llevo sujetador. Gusto a las mujeres porque no parezco una chica que les robaría al marido. Al menos no por mucho tiempo…”
Jean Harlow
Cierta vez,
cuando le preguntaron al poeta, crítico y filósofo Samuel Taylor Coleridge si creía
en los fantasmas, respondió con ironía: “¡No, señora! He visto
demasiados para creer en ellos”. Y que cuando al estadista británico Winston
Churchill, que admitía la existencia de los espectros, le hicieron la misma
pregunta, respondió: “No, los verdaderos fantasmas no se ven.” De estas
ingeniosas respuestas se deduce que creer en fantasmas va mucho más allá de
haberlos visto alguna vez o no, y que lo verdaderamente importante no son las
presencias/ausencias sino el modo en que nos relacionamos con ellas.
Para los crédulos
y los incrédulos, traigo hoy una nueva entrega de la saga “Hollywood Paranormal”,
dedicada esta vez a Jean Harlow, la rutilante rubia platino que fue inspiración de Marilyn Monroe , y a su segundo
esposo, el malogrado Paul Bern.
UN POCO DE HISTORIA: JEAN HARLOW
Harlean Harlow Carpenter, conocida como Jean Harlow nació en Kansas
City, el 3 de marzo de 1911, hija de Mont
Clair Carpenter, dentista, y Jean Poe Harlow, una mujer extremadamente
protectora, situación que creo entre ella y Jean un relación muy estrecha para el resto de sus vidas. Solía llamarla Baby en vez de Harlean, y sólo cuando ingresó en la escuela para
niñas "Miss Barstow", en Kansas, la pequeña se enteró de que su verdadero nombre era
Harlean y no Baby. Poco después, sus padres se divorciaron. La madre consiguió su custodia y Jean sólo volvió a ver a su padre una vez en su vida.
En 1923,
madre e hija se mudaron a Hollywood con la esperanza de que la
chica se convirtiera en una gran estrella, pero tras estudiar brevemente en una
escuela dramática sin lograr mucho, regresaron a Kansas. Jean estudió más tarde en la "Ferry High School"
en Lake Forest, Illinois, y a los 16 años conoció a Charles
McGrew, de 20 años, heredero de una gran fortuna, con el que contrajo matrimonio. La
pareja se mudó a Los Angeles, donde
por fin unos ejecutivos de la Fox se
interesaron en la chica, y fue en ese momento cuando adoptó el nombre
con el que se hizo famosa.
Debutó
en cine trabajando como extra e interpretando pequeños papeles. Su primer
protagónico lo tuvo en la película “Hell's
Angels” (“Los ángeles del
infierno”, Howard Hughes, 1930), con la que encandiló al
público pero no a la crítica, que incluso llegó a juzgar su actuación
como terrible. Luego participó en películas como “The Public Enemy” (“El enemigo público”,
William A. Wellman,
1931), con James Cagney, y "Goldie" (Benjamin Stoloff, 1931),
con Spencer Tracy.
Jean Harlow era muy popular entre el público, pero los críticos de cine se burlaban de ella. Frank Capra la dirigió en 1931 en “The golden cage” (“La jaula de oro”), con Loretta Young, y decidió cambiar el nombre de la película por el de “Platinum Blonde”, precisamente por su color de pelo. En pleno apogeo de su éxito, muchas de sus fans femeninas se tiñeron el pelo de rubio platino como ella, e incluso Howard Hughes organizó un concurso entre peluqueros: el que más cerca estuviera de lograr el tono de rubio de la actriz, se llevaba un premio de 10.000 dólares.
Poco después, a la edad de 21 años, Harlow firmó un contrato con Metro Goldwyn Mayer (MGM). Fue entonces cuando Jean se convirtió en una superestrella, con películas como “Red-Headed Woman” (“La pelirroja”, Jack Conway, 1932) y “Red Dust” (“Tierra de pasión”, Victor Fleming, 1932).
El furor sexual de Harlow era conocido por todo Hollywood, y se dice que por su cama pasaron los actores más populares y los productores mas influyentes de la época. Howard Hughes, Clark Gable y Charles Chaplin fueron algunos de sus amantes.
El 2 de julio de 1932, Jean Harlow se casó con el productor cinematográfico Paul Bern. El matrimonio duró poco: Bern fue hallado muerto en su casa el 5 de setiembre de 1932. Hubo rumores de que la propia Jean lo había asesinado durante una discusión. Los ejecutivos de MGM no tardaron en asegurar que la muerte de Bern había sido un suicidio, alegando como motivo que el productor padecía impotencia. Semejante acontecimiento no dañó para nada la carrera de Harlow, que alcanzó, incluso, más popularidad que antes.
LOS FANTASMAS DE JEAN HARLOW Y PAUL BERN
Poco después, a la edad de 21 años, Harlow firmó un contrato con Metro Goldwyn Mayer (MGM). Fue entonces cuando Jean se convirtió en una superestrella, con películas como “Red-Headed Woman” (“La pelirroja”, Jack Conway, 1932) y “Red Dust” (“Tierra de pasión”, Victor Fleming, 1932).
El furor sexual de Harlow era conocido por todo Hollywood, y se dice que por su cama pasaron los actores más populares y los productores mas influyentes de la época. Howard Hughes, Clark Gable y Charles Chaplin fueron algunos de sus amantes.
El 2 de julio de 1932, Jean Harlow se casó con el productor cinematográfico Paul Bern. El matrimonio duró poco: Bern fue hallado muerto en su casa el 5 de setiembre de 1932. Hubo rumores de que la propia Jean lo había asesinado durante una discusión. Los ejecutivos de MGM no tardaron en asegurar que la muerte de Bern había sido un suicidio, alegando como motivo que el productor padecía impotencia. Semejante acontecimiento no dañó para nada la carrera de Harlow, que alcanzó, incluso, más popularidad que antes.
Después de enviudar, Jean Harlow tuvo un
romance bastante indiscreto con el boxeador Max Baer, cuya mujer amenazó con divorciarse
nombrándola a ella como causa principal. Para acallar el escándalo, MGM casó a
la actriz con el cineasta Harold Rosson. Ambos se divorciaron sin más escándalos siete meses después. Se enamoró después del actor William Powell, con quien pensaba volver a casarse.
A mitad de la década de 1930, Jean Harlow
era una de las mayores estrellas del cine estadounidense y la principal actriz
de la MGM. Su última película fue “Saratoga” (Jack Conway,
1937), junto a Clark Gable.
La rubia platino murió el día 7 de junio de 1937, con apenas 26 años.
LA MUERTE DE LA RUBIA PLATINO
En
el mes de febrero de 1937, Jean Harlow tuvo una gripe. Los médicos
que la atendieron la trataron, además, por algunos problemas renales que padecía
desde que de niña, secuelas de la escarlatina. Dos meses después, a pesar de
que todavía no estaba recuperada, la MGM le exigió que comenzara a filmar la
película “Saratoga” en la que formaba pareja con Clark Gable. Un sábado la
actriz se desmayó en el plató. Fue
trasladada al hospital y diagnosticada con uremia, una afección
caracterizada por niveles excesivamente elevados de desechos en la sangre,
debido a que los riñones no funcionan bien. Durante
todo el fin de semana Jean Harlow sufrió fuertes dolores en la espalda y en el
estómago. El día 7 de junio de
1937, la rubia platino murió en el "Good Samaritan Hospital" de Los Angeles.
La
causa de la muerte de Jean fue una insuficiencia renal pero la prensa amarilla
no se conformó con el dictamen médico. Las columnas de chismorreo
cinematográfico publicaron teorías descabelladas. Algunos afirmaron que su madre se había negado a llamar
a un médico porque pertenecía a la Iglesia de
Cristo Científico (que tiene un sistema de creencias religiosas y espirituales establecido
en el siglo XIX por Mary Baker Eddy y asegura que sus preceptos sirven para curar
enfermedades), e, incluso, que la propia Jean había rechazado el tratamiento médico o la cirugía. Otros
aseguraron que Harlow había muerto a causa del alcoholismo, de un aborto fallido
realizado en su propia casa, de una dieta excesiva, de una insolación, de un
envenenamiento debido a la tintura platinada o de varias enfermedades venéreas.
Después
de la muerte de Jean, su novio William Powell, quedó destrozado. Él fue quien
se encargó del funeral. Compró tres criptas en el Forest Lawn Memorial Park, en Glendale, California,
una para Jean, otra para su madre y otra para él
mismo. Jean fue enterrada con la bata que usó en la película "Libeled Lady" ("Una mujer difamada", Jack Conway, 1938). El epitafio de Jean Harlow dice, simplemente, "Our Baby" ("Nuestra bebé"), tal como su madre solía
llamarla.
PAUL BERN
Todo el mundo quedó sorprendido cuando Paul Bern y Jean Harlow
se casaron el 2 de julio de 1932. Él tenía 42 años y ella, 21. Se
conocieron en la filmación de “City Lights”
(“Luces
de la Ciudad”, Charles Chaplin, 1931) y Bern quedó prendado de la hermosa rubia. Bern
había sido ayudante de Irving Thalberg
en la Metro Goldwyn Mayer, y fue un factor decisivo para la incorporación de
Jean a la compañía.
El 5 de septiembre de 1932, el mayordomo de
Bern encontró su cadáver en el dormitorio de su Jean Harlow en la mansión que
compartían en Benedict Canyon. Estaba desnudo, tendido frente a un
espejo de cuerpo entero, bañado en "Mitsouko", el perfume preferido de su esposa, con un disparo en el cabeza procedente de una pistola calibre 38 que
yacía a un costado. Jean se hallaba de visita en casa de su madre.
El mayordomo no llamó a la policía;
telefoneó en su lugar a la Metro Goldwyn Mayer. Enseguida, Louis B. Mayer e
Irving Thalberg llegaron al lugar. Mayer encontró una nota firmada por Bern
encima del tocador de su esposa: “Mi muy querida, desgraciadamente, ésta es la
única salida para reparar el daño que te he causado y borrar mi humillación. Te
amo, Paul. Espero que entiendas que lo de anoche sólo fue una comedia.”
Mayer guardó la carta y sólo se decidió a
mostrarla cuando Howard Strickling, Jefe de Publicidad del estudio le aconsejó
que lo hiciese. La policía llegó al lugar dos horas y media después que Mayer y
Thalberg.
La productora enseguida lanzó el rumor
acerca de que Paul Bern era impotente y que se había quitado
la vida por no poder cumplir con su deber marital. Jean Harlow dijo
no tener ni idea de lo que significaba la nota. Por otra parte, Paul tenía
fama de conquistador (había tenido affaires con Joan Crawford y Mabel Normand, entre otras), y pronto a la historia de la impotencia
le surgió una competidora. Antes de casarse con Jean Harlow, Paul mantuvo una
larga relación con Dorothy Millet, una aspirante a actriz. Aunque su
unión nunca se legalizó, fue un matrimonio en la práctica, y ambos se referían
al otro como esposo. Sin embargo, la historia se vio truncada por los problemas
mentales de ella que la llevaron a un psiquiátrico en Connecticut. En el momento del matrimonio entre Paul y Jean, Dorothy se
encontraba en San Francisco, recuperada de sus problemas del pasado, y Bern la
mantenía con 350 dólares mensuales.
Si Jean Harlow sabía de
estos gastos, es algo que se desconoce, pero lo cierto es que era una cantidad que el
productor no se podía permitir. Paul Bern estaba en bancarrota y
que el dinero de la casa provenía del trabajo de Jean. Muchos
supusieron, entonces, que la rubia platino había descubierto la historia de su
marido con Dorothy Millet, e indignada al enterarse de que mantenía a otra mujer con su dinero, había matado a su marido.
Días después de la muerte de Paul Bern, Dorothy
Millet se suicidó arrojándose al río Sacramento. Por lo que también
hubo rumores que la señalaban como responsable de la muerte de Paul. Supuestamente, esa
noche la mujer había visitado a Bern en su casa para pedirle
explicaciones (los vecinos pudieron escuchar gritos de discusión) y lo
asesinó. Esta teoría fue avalada en 1990, por el productor de cine Samuel
Marx, amigo y colega Bern e Irving Thalberg, quien
publicó en un libro una versión diferente de la muerte de Paul.
Marx, entonces Jefe del Departamento de Guiones de MGM, dijo
que había ido a la casa de Bern en la madrugada del 5 de
septiembre de 1932, antes de que la policía fuera notificada del descubrimiento
del cuerpo, y había visto a Thalberg adulterar la evidencia.
Según él, fue uno de los ejecutivos del estudio quien le sugirió a Louis
B. Mayer la historia del suicidio por impotencia para
evitar un escándalo que hubiera terminado con la carrera de Harlow. Marx, después
de revisar la evidencia, concluyó que Bern fue asesinado por Dorothy Millette.
El guionista Ben Hecht, en el número
de noviembre de 1960 de "Playboy", cuestionó el veredicto oficial de
la muerte de Bern, lo que provocó un renovado interés en el
caso. Hecht sugirió que Paul Bern había
sido asesinado por una mujer desconocida y que la historia se había ocultado
porque iba a dañar la reputación de seductora de Jean. El
artículo hizo que el fiscal de distrito del condado de Los Angeles, William
B. McKesson, reabriera el caso, que enseguida volvió a cerrarse.
LOS FANTASMAS DE JEAN HARLOW Y PAUL BERN
Jean Harlow y Paul Bern vivieron juntos en la mansión
ubicada en el 9820 de Easton Drive, en Benedict
Canyon, Beverly Hills. Todos los propietarios posteriores de la casa reportaron
apariciones fantasmales y hechos inexplicables en el lugar.
En 1963, la casa fue comprada por Jay
Sebring, un estilista de celebridades y fundador de la
corporación de peluquería Sebring International, que no creía
en maldiciones y no se dejó amedrentar ni por el fantasma de Paul Bern, ni por
un supuesto accidente ocurrido en la piscina de la mansión, donde se ahogaron dos personas. En 1964, durante una fiesta en Hollywood, Sebring
conoció a la bellísima actriz Sharon Tate y comenzaron una relación. Ambos
pasaban mucho tiempo en la casa de Benedict Canyon. Una noche, según
contó la propia actriz, estaba en su habitación mientras Sebring se encontraba de
viaje en Nueva York. De pronto vio un pequeño y tenebroso hombre en la
habitación, cuya descripción encajaba con la de Paul Bern. Parecía buscar algo y la ignoró por completo. Impactada por la aparición, Sharon corrió hacia el piso de abajo, y vio a otra persona colgando
de la baranda de la escalera con la garganta cortada. Conmocionada, Tate entró en la sala de estar para servirse
un trago, pero no encontró dónde Sebring guardaba el alcohol. Sintió el
inexplicable impulso de presionar una sección de una biblioteca, que se abrió
revelando una barra oculta. Sin pensar, arrancó un pedazo de papel tapiz en la
base de la barra mientras se servía una copa. Por la mañana, Sharon estaba convencida
de que todo había sido una terrible pesadilla, hasta que vio el papel tapiz que
había arrancado del bar.
El 9 de agosto de 1969, a menos de una milla de la casa
en Benedict Canyon, Sharon Tate, con un embarazo muy avanzado, Jay
Sebring y tres personas más fueron brutalmente asesinados por
la Familia de Charles Manson, en la mansión que ella compartía con
su esposo, el director de cine Roman Polanski, en Cielo Drive.
Sharon no sólo se había topado con Paul Bern en la antigua casa de Jean Harlow,
sino que había tenido una premonición de su trágica muerte: la actriz recibió 17 puñaladas y apareció colgada de una
soga en el living de la mansión.
Si bien se habla que el fantasma que más aparece por los alrededores de la casa de Benedict Canyon es el de Paul Bern, el de Jean Harlow también ha sido visto por algunos vecinos. La mayoría coincide en que sus apariciones ocurren en la piscina cada 3 de marzo, la fecha de su natalicio.
Si bien se habla que el fantasma que más aparece por los alrededores de la casa de Benedict Canyon es el de Paul Bern, el de Jean Harlow también ha sido visto por algunos vecinos. La mayoría coincide en que sus apariciones ocurren en la piscina cada 3 de marzo, la fecha de su natalicio.
Hasta aquí, amables lectores, todo lo que tenía para ofrecerles hoy. Me despido de ustedes con un microcuento del autor argentino Orlando Romano:
FANTASMAS
El doctor Follet ocupó gran parte de su vida tratando de atravesar paredes como un fantasma. Luego de un nuevo intento malogrado, rompió a pedazos el muro de la sala con un martillo.
Sobresaltada por el alboroto, la familia acudió. Follet contó su impotencia, su enorme desaliento, su pena. Los otros aceptaron de buena gana las explicaciones, y se desvanecieron.
Buenas tardes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario