martes, 25 de diciembre de 2018

EL LADO B DE PAPÁ NOEL: CRIATURAS NAVIDEÑAS QUE METEN MIEDO II


EL LADO B DE PAPÁ NOEL: CRIATURAS NAVIDEÑAS QUE METEN MIEDO II

"Una buena conciencia es una continua Navidad."
Benjamin Franklin


Buenas noches, amables lectores. Aquí estoy nuevamente con la segunda y última parte de esta lista de criaturas navideñas espeluznantes. Disfruten. 


-HANS TRAPP

Hans Trapp es un temible ser mitológico europeo, al que suele considerárselo acompañante de Papá Noel. Su misión es castigar a los niños que se han portado mal durante el año y no merecen recibir regalos. La leyenda cuenta que se era un hombre rico y avaro que adoraba a Satanás, hecho por el que fue excomulgado. Rechazado por la sociedad, se internó en el bosque, enloqueciendo a causa del aislamiento. Allí vivió durante mucho tiempo escondido y disfrazándose de espantapájaros para cazar niños y devorarlos. Cierta vez, cuando estaba a punto de atrapar a un pequeño, fue alcanzado por un rayo de luz divina que lo mató al instante. A pesar de haber muerto Hans Trapp continúa vagando por el mundo con su bolsa al hombro, persiguiendo a sus víctimas, los niños traviesos y mentirosos.
Hans Trapp es un equivalente a nuestro hombre de la bolsa o cuco. Suele visitar a los niños en la misma época que Papá Noel, pero a diferencia de éste, que fue obispo y viste las galas correspondientes, lleva generalmente grandes botas sucias y una túnica marrón, además de una barba negra bien tupida. Se lo asocia con un curtidor o carbonero. Es el que se ocupa de castigar a los niños díscolos con látigos y palos.
En Francia, este oscuro personaje se vincula con Hans von Trotha (ca. 1450-1503), un caballero alemán, cuarto hijo del Arzobispo de Magdeburgo y Mariscal del príncipe-elector del Palatinado, excomulgado por el papa Alejandro VI por haberse negado a jurar fidelidad a un Papa Borgia. El folklore alemán lo denostó bautizándolo Hans Trapp o, más raramente, Hans Trott, y envolviéndolo en una oscura leyenda que lo tacha de hombre rico y avaro, adorador de Satanás, que fue excomulgado y desterrado a un bosque. 


-JULBOCK

Las fiestas de Yule (del nórdico antiguo: Júl) se celebran cada solsticio de invierno. Es una celebración de los pueblos nórdicos, relacionada con la mitología germana y el paganismo nórdico. El Yule originalmente duraba doce días y el cristianismo lo asimiló a la Navidad.
La historia de la cabra de Yule está relacionada con la figura del dios nórdico Thor, cuyo carro era tirado por dos cabras: Tanngrisnir (enseña dientes o gruñido en nórdico antiguo) y Tanngnjóstr (dientes afilados en nórdico antiguo). Una de las leyendas ligadas al dios Thor narra que, en la época de Yule, mató  a ambas cabras para cenar y compartió su carne con Loki y una familia de campesinos. Posteriormente, revivió a los animales con su martillo Mjöllnir.
Este mito evolucionó hasta convertir a la Julbock (cabra de Yule) en un personaje humanoide con cuernos y pezuñas, que representaba al demonio. La cabra mutó, entonces,  en un personaje terrorífico que causaba más de un quebradero de cabeza a la población y exigía todo tipo de ofrendas.
En Finlandia la gente consideraba a la cabra de Yule como una criatura no demasiado agraciada que asustaba a los niños.  Existía una antigua tradición en la que hombres vestidos con pieles de animales y máscaras con cuernos de cabra solían salir y recorrer casa por casa asustando a la gente en busca de las sobras de la comida de los festejos relacionados con el solsticio de invierno.
En el l siglo XIX,  la cabra cambió su rol de pedidora de regalos  al de dadora de los mismos a quienes eran merecedores de sus favores.
En el siglo XX, la cabra de Yule fue asimilada a la figura de Santa Claus, al cual todavía se le conoce en Finlandia como Julbock.


 -LE PÈRE FOUETTARD

Le Père Fouettard (el Padre Azotador) es, al igual que Hans Trapp, otro de los ayudantes oscuros de Papá Noel, cuya leyenda surgió en el este de Francia. Es un personaje barbudo de túnica negra y canasta de mimbre en la espalda, que lleva un látigo o una vara y que, mientras el santo entrega los regalos a los niños buenos, golpea a los traviesos, haraganes y mentirosos. A pesar de que no ser visualmente aterrador como otros personajes malvados que visitan nuestro mundo en época navideña, algunas de las historias que dieron origen a le Père Fouettard son bastante espeluznantes. La leyenda, que se remonta al año 1150, asegura que se trata del asesino que trabaja para Papá Noel con el fin de expiar sus pecados. Según se cuenta, un posadero (o un carnicero en algunas versiones) capturó a tres niños de buena posición y, junto a su esposa, decidió matarlos para quedarse con sus riquezas. Hay algunos relatos que afirma que los cortaron en trocitos y los guisaron para comérselos. Papá Noel llegó, descubrió el horrible crimen y resucitó a los pequeños. Le Père Fouettard se arrepintió del macabro hecho y se convirtió en el socio del santo. Una versión ligeramente modificada de esta historia afirma que Santa lo obligó a convertirse en su asistente como castigo por sus crímenes.
Otra historia cuenta que durante el asedio de Metz (una ciudad en el este de Francia) en 1552, una efigie del emperador Carlos V fue quemada y arrastrada por la ciudad. Se dirimía entonces la Segunda Guerra de los Margraves (1552-1555), dentro de los enfrentamientos de religión entre el católico Imperio de los Habsburgo y los Estados Luteranos del Sacro Imperio Romano Germánico. Al mismo tiempo que la figura del emperador fue profanada, una asociación de curtidores creó un personaje grotesco (también un curtidor) armado con un látigo y atado con cadenas que castigaban los niños. Después de que Metz fue liberada, la efigie carbonizada de Carlos V y el personaje creado por los curtidores de alguna manera se asimilaron en la figura hoy conocida como le Père Fouettard. Los acontecimientos que rodean la liberación de la ciudad y la quema de la efigie coincidieron con la celebración de San Nicolás, por lo que le Père Fouettard se convirtió en su cara oscura.
En la década de 1930, el siniestro personaje apareció en los Estados Unidos con el nombre de Padre Flog o Spanky. Aunque casi idéntica a la personificación original en francés, el Padre Flog no tiene nada que ver con la Navidad y, junto a su esposa o una cómplice llamado Madre Flog, tiene la tarea de castigar a los niños por su mal comportamiento (por ejemplo, cortarles la lengua a los niños mentirosos).



-GRÝLA

Grýla es uno de los seres folclóricos más antiguos de la mitología islandesa. Se trata de una bruja terrorífica u horrible ogresa que vive en las montañas de Islandia. Cuando se acerca la Navidad, toma su bolsa y baja a los pueblos en busca de niños que se hayan portado mal.
La leyenda de Grýla se ha utilizado para asustar a los niños islandeses durante siglos, ya su plato favorito es un estofado hecho con infantes desobedientes y su apetito resulta insaciable. Su nombre se menciona ya en los Edda, la Saga Íslendinga y en la Saga de Sverre (cuya primera parte se titula Grýla), literatura del folclore islandés, que data del siglo XIII. 
Grýla no se vinculó directamente con la Navidad hasta el siglo XVII, momento en el que, además, pasó a ser considerada la madre de los 13 jólasveinar, seres mitológicos descendientes de los trolls.
De acuerdo con el folclore, Grýla se casó tres veces, y se cuenta que su tercer marido, Leppalúði, se fue a vivir con ella a una cueva en los campos de lava de Dimmuborgir, con sus hijos y el gran Jólaköttinn o gato de Yule.  En 1746 se declaró un decreto público que prohibía el uso de las figuras de Grýla y los jólasveinar para aterrorizar a los niños.
La leyenda de Grýla aparece en muchas historias, poemas, canciones y obras de teatro islandesas, y aunque en algunas de dichas historias Grýla muere al final, sigue aterrorizando a niños entrado el siglo XXI. En el 2010, un diario digital satírico estadounidense, The Onion, culpó a Gryía de la erupción del volcán Eyjafjallajökull.


-KRAMPUS

El Krampus es una criatura del folclore de los países alpinos. Según la leyenda, esta criatura de aspecto demoníaco castiga a los niños malos durante la temporada de Navidad, en contraste con Papá Noel, quien premia a los niños buenos con regalos. El Krampus aparece en la noche que va del 5 y al 6 de diciembre, y permanece merodeando por las calles durante dos semanas, temporada que se conoce con el nombre de Krampusnacht,  haciendo sonar campanas y cadenas oxidadas. Su apariencia es similar a la del incubo: rostro diabólico, grandes cuernos en la frente, larga lengua roja y cabellera negra. Tiene el cuerpo cubierto por un tupido pelaje oscuro, y sus patas son similares a las de un fauno. En muchas imágenes es ilustrado con una canasta en su espalda, en donde coloca a los niños malos para llevarlos al infierno y comérselos, o con una bolsa que cumple la misma función.
Durante la etapa posterior a la Guerra Civil Austríaca,  la tradición del Krampus fue objetivo de persecución, pero aún hoy, en dicho país, los hombres jóvenes se visten como la temible criatura la noche del 5 de diciembre y deambulan por las calles asustando a los niños.
El Krampus apareció en diversas series de televisión, como “Scooby-Doo! Mystery Incorporated”, “Grimm” y “Supernatural”. En el año 2015 se estrenó la película de terror con toques cómicos “Krampus”, dirigida por Michael Dougherty. 


-LOS JÓLASVEINAR

Los Jólasveinar, Yules Lads o  chicos Yule, son  trece trolls islandeses, hijos de la temible Grýla. Cada uno de ellos tiene un nombre y una personalidad bien definida. En la antigüedad, se creía que robaban cosas y causaban problemas en época navideña, por lo que se utilizaron para asustar a los niños con el fin de que se comportaran de forma correcta, del mismo modo que el gato de Yule. Los Jólasveinar eran los encargados de castigar a los niños díscolos. Sin embargo, el siglo XX los asimiló con la benévola figura de Santa Claus. Las tradiciones se mezclaron, hasta que los Jólasveinar, antes diabólicos, se hicieron lo suficientemente amables como para dejar regalos en zapatos de los niños buenos durante las trece noches previas a Nochebuena. Cada noche, un muchacho Yule visita a los niños, llevándoles regalos o papas podridas, en función de su conducta durante todo el año.

Hasta aquí, mis queridos, todo lo que tenía para ofrecerles hoy. Me despido de ustedes con una cita del talentoso Bob Hope: "Mi idea de Navidad, tanto pasada de moda como moderna, es muy simple: amar a los demás. Pensémoslo, ¿por que tenemos que esperar a Navidad para hacerlo?"

Buenas noches.

2 comentarios: